"Lo que hago es acompañarlos a sacar esa belleza que tienen"
Hannelore Grosser lleva adelante un taller de Arteterapia para personas en situación de discapacidad en Chiguayante.
Para ella, todos pueden conectarse con el arte. Y así lo demostró en la exposición lanzada el jueves pasado en la Casa de la Cultura de Chiguayante. Acá, Hannelore Grosser, destacada ex atleta nacional, Licenciada en Arte y Magister en Filosofía, se presenta como profesora del taller de Arteterapia que, desde marzo de este año, comenzó con clases a personas en situación de discapacidad. Fueron estos últimos los que mostraron su talento con el pincel y la pintura.
Resultados que a la penquista, especializada en Arteterapia, la congratula al máximo. "Lo que yo hago es acompañarlos a sacar esa belleza que tienen y que a veces no logran dimensionar y que es maravilloso tanto para ellos y también para mí, porque quien hace que uno sea una buena profesional son los alumnos, mis pacientes, las personas que acompaño en este proceso".
Sobre la muestra, explica que "es la experiencia final de un taller que duró tres meses. Hicimos una caminata consciente por este patio de la que era la ex casa Machasa, que era una quinta, con patios y flora muy grande. Observamos la naturaleza, recolectamos objetos orgánicos, nos conectamos con la naturaleza. De eso surgió un registro visual a modo de bocetos, como un libro de apuntes. Ellos eligieron dos imágenes y las llevamos a pintura. Son 16 obras en diferentes formatos".
Potenciar habilidades
Hannelore lleva seis años trabajando con personas en situación de discapacidad, pero en arteterapia unos 15, con diferentes grupos. Según explica, su experiencia mayor se ha enfocado en lo clínico, salud mental y discapacidad. Incluso, estuvo cinco años a cargo de la Unidad de Terapias Artísticas Creativas de la Teletón, donde hacía atención individual y grupal a niños desde los 4 hasta los 28 años, cuando les daban el alta.
"Desde marzo estoy trabajando independiente. Esta fue una invitación, porque conocían mi trabajo algunas personas de la municipalidad de Chiguayante. Me invitaron a trabajar y formar este Taller de Arteterapia para poder brindarles otras herramientas a personas que muchas veces están privadas de cultura, muchas personas en esta situación están alejadas de la creación. Son espacios para los que tienen talentos. En arteterapia nosotros postulamos que todos podemos crear, todos podemos hacer arte", explica.
Agrega que "cuando llegué a la oficina de la municipalidad, me preguntaron que con quién quería trabajar. Dije que con los que están más 'abandonados' en el arte que son los adultos en situación de discapacidad. Entonces se formó un grupo a partir de las derivaciones de los Cesfam. Se armó un grupo de 10 personas que terminaron su educación, que tenían ganas de participar en este taller de arteterapia".
Para ello, le facilitaron la Casa de la Cultura de Chiguayante, donde ha cultivado las aptitudes de sus alumnos. "Es un espacio precioso, que tiene jardines, una especie de bosque. Trabajamos en varias ocasiones fuera de la casa y en diferentes espacios. Para ellos, ir una vez a la semana, fue maravilloso, potenciando este espacio para brindar contención emocional, sobre todo lo que ha sido estos dos últimos meses con el estallido social y también propiciar un aumento en su calidad de vida, darles más herramientas en lo social porque uno de nuestros objetivos principales es potenciar los vínculos, porque ellos en lo social tampoco tienen dónde reunirse y también es distinto vincularse desde las artes, porque uno trabaja desde lo creativo, comparte mucha intimidad con las personas, por lo que se van creando muchos vínculos de amistad entre ellos. Ha sido muy bonito", dice.
"El proyecto de Chiguayante es uno lindo y que seguiremos haciéndolo el próximo año. El trabajar con personas en situación de discapacidad es maravilloso porque es empoderarlos de herramientas que no sabían que tenían", añade.
El arte de otra mirada
Hannelore Grosser cuenta que al especializarse en Arteterapia "comencé a trabajar con poblaciones más vulnerables. Hice mi práctica en violencia intrafamiliar en una casa de acogida en Santiago. Me di cuenta del potencial sanador que tenía el arte, sobre todo en los talleres de dibujo, de color. Ahí surgió una forma de aunar y encaminar mi parte profesional que era el desarrollo artístico, la docencia y por otro lado un trabajo espiritual que llevaba a través de las artes".
Sobre sus proyectos, la ex velocista, que ostentó por más de veinte años el récord nacional en posta 4x400, comenta que "tengo abiertas las postulaciones al diplomado de Arteterapia, quedan pocos cupos. Y también en enero realizo un retiro de tres día en el hotel Parque Las Nalcas en Buchupureo, es de arteterapia chamánica. Una experiencia única que no se hace en Chile. Y también tengo las postulaciones abiertas a un círculo de mujeres. Este son 4 miércoles de enero y está abierto para personas que no están enfocadas en trabajar en la arteterapia, sino que trabajar en el autodescubriento, el empoderamiento femenino, conexión".
"Me invitaron a trabajar y formar este taller para poder brindarles otras herramientas a las personas".
Hannelore Grosser