Casas Industrializadas: ¿La mejor forma de reconstruir?
Tras los incendios del 2023 en la región del Biobío se puso en marcha instalación de estas nuevas construcciones.
Tras las catástrofes que han golpeado al Biobío durante los últimos 15 años, el problema de la vivienda siempre destaca, especialmente debido a las demoras en las construcciones para los afectados, que en algunos casos tardan meses e incluso años.
Sin embargo, tras los incendios que afectaron a la región en 2023, se ha puesto en marcha una nueva fórmula: las viviendas industrializadas. Estas casas se ensamblan en partes en una fábrica, utilizando procesos controlados y estandarizados con nuevas tecnologías, lo que busca acortar los tiempos de espera. Cabe señalar que, en Tomé ya se han instalado 4 de estas viviendas, y en Punta Lavapié van 2, todas por elección expresa de los afectados.
"La construcción industrializada se ha transformado en una muy buena alternativa para afrontar distintos desafíos, más allá de la calidad del producto, sino como actuar justamente frente a emergencias donde se deba iniciar un proceso de reconstrucción", afirmó Claudia Toledo, seremi de Vivienda y Urbanismo.
"En general las viviendas panelizadas o modulares, al ser procesos domotizados y con maquinaria, son de rápida confección, ensamblaje y montaje. Dependiendo de la empresa y sistema, se pueden armar de 1 a 5 viviendas diarias en fábrica promedio, las que pueden salir, una vez realizadas las obras en terreno de fundaciones, piso y conexionado para su montaje", detalló.
Asimismo, la autoridad aseguró que estas nuevas construcciones suponen tres grandes desafíos a favor de nuevas manos de obras más especializadas. "La primera es la reconversión de empresas pequeñas y medianas hacia procesos de tecnologización de los Métodos Modernos de Construcción (MMC), ante lo cual se requerirá de una inversión, por lo cual, el Estado debe entregar y coordinar esa demanda", dijo.
"También ayudará a contar con más profesionales especializados o capacitados para el desarrollo de proyectos de manera computacional, ya que existen una serie de herramientas informáticas para arquitectos e ingenieros en todas sus especialidades, las que las máquinas reconocerán y generarán las partes y piezas de la vivienda", explicó.
"Por último, se permitirá un avance hacia una mano de obra técnica y calificada, ya sea para la operación de maquinarias, procesos de dimensionamiento, montaje y ensamblaje, que además, significa sumar cada vez más a la mujer en la construcción", puntualizó.
Al ser consultada sobre el balance que se hace respecto del funcionamiento de estas viviendas, Toledo sostuvo que "al momento, han sido un buen resultado en el sentido de que contamos con un catálogo de viviendas certificadas que las familias las pueden elegir, el cual esperamos que vaya creciendo año a año, con nuevos diseños y soluciones".
Concepto
Alexis Pérez, doctor en Tecnología de la construcción e investigador de Arquitectura de la USS, expresó que "son edificaciones diseñadas y construidas bajo estándares de industrialización. Esto significa que la mayoría de sus componentes y elementos son producidos de manera estandarizada y modular en fábricas, siguiendo una secuencia de fabricación en serie".
"Este tipo de construcción requiere, desde la etapa de diseño, una coordinación eficaz con las empresas que fabrican estos elementos y módulos, como los baños, por ejemplo. Una vez fabricados, estos se transportan a la ubicación final para su montaje y ensamblaje", dijo.
Sobre las ventajas que tienen estas viviendas, el experto sostuvo que "según la Hoja de Ruta Construye 2022-2025, la construcción de viviendas industrializadas tiene como objetivo acelerar la transformación del sector para avanzar hacia un país más productivo y sostenible".
"Esto permitirá un avance hacia una mano de obra técnica y calificada".
Seremi Claudia Toledo