Jorge Reyes Patuelli
La primera camada de chilenos luchará hoy por avanzar a cuartos de final de la Copa Libertadores. River Plate, de Paulo Díaz, viajará a Brasil para visitar al Inter de Porto Alegre de Charles Aránguiz, y el Athletico Paranaense de Arturo Vidal y Luciano Arriagada recibe al Bolívar de Ronnie Fernández, con la intención de seguir escalando.
En el duelo de argentinos contra brasileños, River llega con ventaja tras el 2-1 en Buenos Aires con doblete de Pablo Solari. Y no será fácil para el equipo de Aránguiz porque el club atraviesa por una crisis de resultados, con cuatro derrotas y tres empates en sus últimos siete compromisos.
El sábado empató 2-2 frente al Corinthians por el Brasileirao, en el que se sitúa en la posición 12, y sin ninguna esperanza de pelear por el título. Su última derrota fue precisamente la semana pasada en su visita al Estadio Monumental, que después de haber conquistado la Liga Profesional argentina está concentrado exclusivamente en la Copa Libertadores, un torneo que en los últimos años lo ha tenido como protagonista.
Eduardo Coudet, gran amigo del entrenador del River Plate, Martín Demichelis, con quien incluso compartió vestuario como futbolista, ha reconocido el favoritismo de los "Millonarios", pero aun así no da por vencido a su equipo.
"Vamos a dar la pelea, pero enfrentaremos al campeón argentino y nosotros estamos en la mitad de la tabla", declaró.
Aunque no anticipó la alineación, lo más probable es que el Inter reciba a River en Porto Alegre con Alan Patrick y el ecuatoriano Enner Valencia en punta, y cuente con la experiencia del "Príncipe" en el mediocampo.
En tanto, el Bolívar de Fernández llega con ventaja a Brasil luego de vencer 3-1, con dos goles del exUniversidad de Chile, en la ida. Por lo mismo, el equipo de Paranaense necesita una victoria por dos goles para definir en penales el cupo de cuartos de final.
Se espera que tanto el atacante como Arturo Vidal sean titulares. Además, el Paranaense, si queda eliminado, podría perder a su gran figura Vitor Roque, ya que los representantes del jugador dieron a entender que, con la transferencia de Ousmane Dembélé al PSG, el Barcelona tiene espacio y recursos para asumir este año la incorporación de la nueva promesa brasileña.