Marcelo Canario Parra
Nacieron como alternativa a una histórica problemática social, sobrevivieron la pandemia y hoy se perfilan como una excelente opción para el cuidado integral de los más pequeños en el Biobío. Por décadas, padres y madres han dejado trabajos para poder cuidar a sus hijos, ya sea por la falta de una red de apoyo, recursos o tiempo. Un obstáculo que se ve con más optimismo gracias al surgimiento de los After School, establecimientos que generalmente reciben a menores de entre 2 a 10 años luego de su jornada escolar, para brindarles un espacio de esparcimiento, sociabilización y aprendizaje a través de los juegos.
Cecilia Silva Delgado es directora del After School Antorayén de San Pedro de la Paz, y explica cómo nació la idea. "Tengo 4 hijos y cuando eran pequeños yo no pude trabajar, tenía que pagar un jardín particular, entonces no me alcanzaba. Me encantan los niños y eso me motivó a realizar este proyecto".
Siguiendo con su relato, contó que "éste es un servicio súper valorado por los padres que deben trabajar. Somos confiables, damos apoyo pedagógico y hay una gran relación con la comunidad. Por un lado me llena como persona y también cubrimos una necesidad que no está bien cubierta actualmente".
En Concepción, uno de los After School con mayor matrícula es el Little Kingdom. Carol Figueroa es educadora de párvulos y directora del establecimiento. En relación a la modalidad, explica que "buscamos la modalidad de hacer esto más flexible. Es importante que los niños no sigan la misma estructura que en el colegio. Como educadora, me gusta que los niños no se olviden de ser niños, que tienen derecho a jugar, a crear, a divertirse y potenciar sus habilidades".
Ambas directoras coinciden que tras la pandemia, la recepción ha sido notable, y que sin duda van en auge. "Los más grandes manifiestan estar contentos por volver al colegio, reunirse con sus compañeros y sociabilizar, eso es súper importante para ellos y su desarrollo", comenta Cecilia Sagredo.
Por otro lado, Carol Figueroa destaca que "hay momentos donde nos juntamos y realizamos conversaciones grupales. Siempre estamos dando a conocer nuestras reglas; si bien hay cierta libertad para disfrutar la vida como niños, fomentamos el respeto y el compartir. La recepción de los niños ha sido maravillosa y los padres están tranquilos y saben que son prioridad".
"Entregamos un servicio súper valorado para los padres que tienen que trabajar".
Cecilia Silva Delgado, directora
2 esquinas de la ciudad de Lebu fueron cerradas a causa del socavón generado.
2 años a diez es el rango de edad de los niños y niñas que reciben los "After School".