Palomares: un barrio en constante crecimiento
Parte del antiguo Camino Real en la época colonial, durante las décadas de 1930 y 40 fueron surgiendo los primeros asentamientos vecinales. El barrio hoy cuenta con una población que supera los 10 mil habitantes.
Palomares se encuentra ubicada en el sector sur oriente de la comuna de Concepción, en un pequeño valle vecino a los de Puchacay y Nonguén. Posee una superficie de 3 km2 aproximadamente. En el año 1700 el valle es mencionado en la crónica que dejan dos viajeros que recorren la región por orden de la corona española, un botánico y un cartógrafo que vadean el río Andalién a la altura del sector.
La importancia histórica de Palomares desde la época de la Colonia, radica en ser parte del antiguo Camino Real que, a través de Penco vía Juan Chico, llegaba por la cuesta de Curapalihue a Florida y desde conectar al Camino Real hacia el norte de Chile. Hasta bien entrado el siglo XX, el sector fue una zona principalmente cerealera, agrícola y ganadera, la cual incorporaba trigos y cebada que eran procesados en un molino que funcionaba en el estero del lugar y que a su vez abastecía con harina, todo tipo de chacarerías, leche y carne, al vasto sector de la zona de Concepción, incluso exportando trigo por los puertos de la bahía de Concepción.
Asentamientos
Los primeros asentamientos de vecinos en el sector parten con la construcción del camino a Bulnes en 1935, y en la década de 1940 van surgiendo las primeras organizaciones vecinales. Llegan primero en tomas y que posteriormente adquieren los terrenos comprándoselos a sus dueños, propietarios de la cantera Giacaman, que existía en el lugar.
El sector se fue poblando mediante el sistema de autoconstrucción, donde fueron llegando entre 20 a 50 familias que van formando lo que hoy conocemos como villa Palomares. Principalmente pobladores dedicados a la agricultura, construcción de ladrillos, carbón, lecherías, queserías y otras artesanías elaboradas con los productos del lugar.
En la década de 1950 se instalan las ladrilleras, en el sector del fundo Santa Adriana, producto del tipo de arcilla existente en el valle y la demanda en la construcción post terremoto de 1939. En el año 1957 se produce el loteo de la Comunidad Agrícola Palomares, incorporándose un lote destinado para plaza.
En cuanto a las necesidades de los vecinos para educar a sus familias, surge en 1962 la escuela 88, que operó en casa de la vecina Juana Mardones y que en su primer día de clases recibió 14 alumnos instruidos por el profesor normalista Mario Faúndez. Posteriormente, este recinto cambia de ubicación y se instala en la Avenida Nonguén, tomando el nombre de Escuela F-588 y atendiendo a 150 alumnos.
En 1987, la Escuela cambia su nombre a "Escuela Palestina", nombre que deriva de la gestión, cooperación y apadrinamiento que realiza la familia de Juan Giacaman y su esposa Rita Hasbún, ambos de origen Palestino, los que donan 8 mil metros cuadrados de terreno y una multicanchas, además de materiales para su construcción. Gracias a ello la Escuela ha podido educar a los más de 400 alumnos que han pasado por sus aulas. Hoy, ese apadrinamiento está en manos de la Colonia Palestina penquista.
Crecimiento
En 1963, Palomares recibe la incorporación de la locomoción colectiva, a través de la construcción de un paradero de la ETCE, Empresas de Transportes Colectivos del Estado, la cual poseía sus talleres y oficinas en la ubicación del actual terminal de buses de Collao. En la década de 1970 en el sector se realiza la instalación del agua potable, producto del trabajo mancomunado de sus vecinos, y en 1972 llega a Palomares el alumbrado público y domiciliario.
Entre 1966 y comienzos de 1970, las organizaciones sociales comienzan a obtener sus personalidades jurídicas, primero fue la junta de vecinos 15R, y luego nacerá la junta de Vecinos 16R 21 de Mayo, y en el 2002 nace la Junta de vecinos Valle Verde, que abarca el sector del mismo nombre, al final de la avenida Chile.
En 1975 se crea la primera capilla católica del lugar, denominada "Cristo Salvador", en el sector de Palomares bajo, con el tiempo se irán sumando iglesias de otros credos, clubes deportivos y otras organizaciones comunitarias. En 1981 hay una reestructuración administrativa de los territorios de la provincia, permitiendo que Palomares se integre a la comuna de Concepción y deje de ser parte de la comuna de Penco.
Actualmente el barrio se divide en los sectores de San Ramón 1 y 2, Los Copihues, La Puntilla, Villa Obrera, Santa Lucia, La Alborada, Alpatacal, Valle verde, Las Brisas, Industrial y 21 de Mayo. Hoy en día el sector es principalmente residencial, con actividades de comercio menor, como negocios pequeños y panaderías.
Los parajes del sector son rurales, caracterizado por un microclima tipo mediterráneo, y por estar rodeado de cerros y bosques forestales. Debido a las condiciones del terreno, Palomares está dividido entre un sector alto y un bajo, debido al cruce de un estero que hoy ya no existe, y que fue transformado en lo que hoy es la Avenida Giacaman, aun cuando la antigua denominación se mantiene.
Hoy Palomares constituye un sector de la población penquista que mantiene un arraigo e identidad propia que lo hacen característico de una manera de vivir y proyectarse en el tiempo, aun cuando la mayoría de la población ha experimentado un cambio en sus actividades laborales agrícolas de antaño, cambiándose éstas por nuevos emprendimientos, como mini comerciantes, leñateros, entre otras actividades.
Alejandro Mihovilovich, Profesor de Historia, Director de Extensión Biblioteca Municipal de Concepción