Manuel Muñoz González
Cada día que pasa la incertidumbre es mayor para los trabajadores de Huachipato y para las miles de personas que se mueven laboralmente en torno a la siderúrgica.
Y lo que es peor, no se advierte un escenario muy positivo en cuanto a que se revierta el anuncio de cese de operaciones de la compañía, lo que tiene a trabajadores y sus familias viviendo un complejo momento, tanto en lo sicológico, como en lo económico.
Así lo expresa, por ejemplo, Elena Escalona, funcionaria durante 16 años en el área comercial de la empresa. "La incertidumbre es grande, porque si bien mi marido trabaja, somos los dos los que solventamos los gastos del hogar, entonces con esto va a haber un sueldo menos, nos vamos a ver mermados en una entrada, por lo que desde ya vamos a tener que apretarnos un poco el cinturón como familia", cuenta.
Un ajuste económico que tendrán que hacer en caso de concretarse el cierre de la siderúrgica, y que se suma a otro drama que enfrentan los trabajadores en el día a día en la parte anímica. "Por supuesto está la parte personal, en mi caso llevo 16 años que no hago un currículum, entonces salir a buscar trabajo, no solo yo, sino que más de mil personas, es duro. Y por supuesto hay un tema emocional, porque se van amigos, personas que son jefes de hogar. Es un panorama muy oscuro y muy penoso. Hoy estoy en la empresa pensando qué voy a hacer, y a la vez tratando de trabajar y cumplir con lo que corresponde", remarca la funcionaria acerera y madre de dos hijas. "Cuando este anuncio pasó fue algo fuerte, pero cuando llegué a la casa, ahí recién pude llorar", lamentó.
Ser fuerte
Jimena Romero, funcionaria durante 26 años en Huachipato, también compartió este difícil momento producto de la actual situación.
"Una se tiene que contener un poquito sola. En mi caso tengo un hijo de 14 años y no le puedo transmitir el miedo que siento hoy en día. También vivo con mi papá, una persona mayor, de 84 años, y en esta situación me afecta mucho, tanto a mi, como al papá de mi hijo que también trabaja en Huachipato", contó la funcionarias del área de Personal, con voz temblorosa y evidente pena.
"Estamos mal, dentro de todo tratamos de contenernos entre los mismos compañeros, porque es una situación que estamos viviendo todos por acá. Una tiene que seguir trabajando, pero es inevitable no pensar en el tema, una se bajonea y se viene a la mente esa incertidumbre que hay por delante. A todos nos afecta emocionalmente, acá hay gente de más de sesenta años que trabaja en la empresa, uno dice dónde van a encontrar trabajo, se van a tener que reinventar u optar a una jubilación anticipada, en general se va a hacer muy difícil la situación para todos", expresa Jimena Romero.
"La incertidumbre es grande; estoy pensando en qué voy a hacer, y tratando de trabajar".
Elena Escalona.
"Cuesta mantener el foco, pero hay que hacerlo. Hay un tema de salud mental que acá afecta a todos".
Jimena Romero,, trabajadora de Huachipato