Verónica Milla
Un manifiesto de sentires y experiencias es lo que la música de Bitácora Celeste le ofrece al público de la región del Biobío a través de su pop de autor. Se trata de un proyecto con el que la penquista Catalina Parra comenzó en 2015 su trayectoria musical, utilizando la grabadora de su celular, aunque su interés por el mundo artístico nace desde pequeña, gracias a su familia.
"La música siempre estuvo presente en mi vida. Mi papá siempre cantaba y tocaba en la casa, mientras que mi mamá, siendo profesora de kinder, realizaba sus clases como si fueran musicales", explicó la artista local.
Entre las cosas que llaman la atención de su propuesta musical es su nombre artístico. La cantante penquista comentó que su inspiración proviene de los sentires. "Bitácora viene de darle forma y sentido a lo que realizaba, canciones, dibujos, historias y poemas, donde anoté avances y correcciones; quedando ahí para siempre. Y lo 'celeste', es por lo celestial, lo sideral o espacial", agregó.
éxito musical
Bitácora Celeste define su estilo musical como una propuesta introspectiva que propone adentrarnos en un viaje onírico.
"Mi música la describo como un manifiesto de sentires y experiencias que quiero expresar para poder llegar a los sentimientos más profundos. En lo musical, me describiría como un pop de autor, ya que tengo influencias del dream pop, grunge, y el pop en general; jugando con voces e intenciones del mensaje desde un lado teatral e interpretativo", sostuvo.
Hasta la fecha, entre los trabajos que posee la artista se cuentan un demo, muchas maquetas en Souncloud -subidas por ella desde los 14 años- y los singles "Quédate conmigo", "Recuerdo", "Arde" y "Gesto de Amor", los cuales están disponibles en su perfil de Soundcloud y en Spotify.
El último lanzamiento de Bitácora Celeste fue "Ojalá", cuyo concepto principal es una inédita interpretación performática alusiva al oscuro clímax de desesperanza, la cual es propia de los estados depresivos.
Debut en teatro
Bitácora Celeste se presentó con una sonoridad definida por ella como "pop de autor", en escenarios como Rockódromo 2021, Sesiones Caracol, Balmaceda Arte Joven y Artistas del Acero. Sin embargo, hay un escenario icónico de la Región del Biobío que le faltaba por recorrer -el Teatro Biobío-, en el que recién debutó.
"Estoy muy feliz y emocionada, ya que es una oportunidad para presentar de forma más completa el imaginario que llevo trabajando. El recinto entrega las condiciones para hacer algo más grande y es justo lo que quiero hacer junto a mi equipo", expresó.
Su show contó con el estreno de nuevas canciones y sus últimos singles. La cantautora penquista prometió romper una vez más la "barrera" con su público en su próximo espectáculo con una propuesta más íntima e inmersiva que busca consolidar su universo sonoro, lo que cumplió.
"Fue un concierto íntimo que buscó teletransportar a los espectadores al mundo onírico de Bitácora Celeste", describió.
También, el evento contó con la participación especial del cantautor Pollomaticoquillay, quien desplegó sonidos latinoamericanos con influencias afroamericanas.
Trabajo en equipo
Catalina Parra afirmó que su debut en el Teatro Biobío como Bitácora Celeste le permitirá alcanzar los recursos necesarios para desarrollar integralmente su propuesta audiovisual. A la vez, destacó que dicho espacio permitirá potenciar los talentos y las fortalezas de cada artista y colaborador que participa en el equipo de la compositora.
Su recital propuso un rol más protagónico de su banda: Valentina Soto (violín), Diego Sepúlveda (guitarra), Hernán "Larecores" (voz) y Lorenzo "Lolo" Garrido (piano). Además de ellos, Catalina destaca el trabajo de Jorge Arancibia, con quien -junto a Manuel Robles- está trabajando las proyecciones visuales del show.
"La música es un pilar emocional para mí. Poder compartirla y trabajar con mis amigos es un privilegio que no esperaba tener hace algunos años", finalizó.
"Mi música la describo como un manifiesto de sentires y experiencias.
Bitácora Celeste
