¡Bicampeones!
Campanil sacó a relucir anoche toda su jerarquía y se coronó por segundo año consecutivo como campeón de la Liga Nacional de Básquetbol. Histórico.
Otra vez en la cima del básquetbol nacional; otra vez fuera de casa, y de nuevo coronándose como el mejor equipo cestero de la Liga Nacional.
Simplemente espectacular es lo que anoche consiguió el conjunto de la Universidad de Concepción, que fue hasta Quilpué para ir a buscar el último punto que necesitaba en la serie frente a Colegio Los Leones, para quedarse nuevamente con el cetro de campeón.
Y lo hizo de forma magistral, dominando el juego de principio a fin, y derrotando al cuadro local en una demostración de carácter y buen juego sobre "la duela".
Tal como hace un año, cuando alzó el cetro en calidad de visitante en Valdivia, al derrotar al cuadro local en una vibrante definición, anoche los dirigidos por Cipriano Núñez sacaron a relucir su jerarquía, para imponerse ante un repleto gimnasio y ante un cuadro que de local en esta serie se había hecho fuerte.
De principio a fin
Pero los universitarios estaban dispuestos a hacer historia. Fue así como de entrada lo comenzó a plasmar en la carpeta sobre los locales, llevándose la primer manga 19-16.
La cifra se estiró al término del primer tiempo, pues los foreros se fueron al descanso con 9 de ventaja, 41 sobre 32.
Los locales estrecharon le tablero en el tercer parcial, finalizando 55 para la UdeC y 49 para Los Leones. Sin embargo, en el último cuarto el Campanil aprovechó cada posesión y terminó ganando de forma holgada por 12 de diferencia, sellando el cuarto y definitivo punto por un amplio 75 a 63.
Y tal como en el juego anterior en la Casa del Deporte, el máximo anotador de la noche fue Jerry Evans Jr., quien se matriculó con 17 puntos, siendo una de las figuras excluyentes en la serie para el Campanil. Le siguieron los 14 puntos de Kevin Rubio, los 12 de Evandro Arteaga, 11 de Diego Silva, 10 de Arnold Michel, 9 de Eugenio Luzcando y los 2 de Eduardo Marechal.
Tras el pitazo final, la emoción se apoderó de jugadores, cuerpo técnico y del puñado de hinchas que acompañó al equipo, todos fundidos en abrazos y llenando de alegría el centro de la cancha, ante una afición local que se limitó a respetar y aplaudir a los ahora bicampeones.
Evandro Arteaga, uno de lo que se repitió el plato y sumó este bicampeonato a su palmarés, expresó que lograron lo que fueron a buscar, y que la confianza que les dio ganar el quinto juego en tiempo extra fue un aliciente relevante en la definición.
"Vinimos acá a buscar el punto que necesitábamos, sabíamos que Leones se hace fuerte en casa, en todos lados, tuvimos algunas complicaciones en el quinto partido en nuestra casa, pero con garra lo sacamos adelante, con detalles finos a nuestro favor. Ese quinto partido pudo valer un título, porque nos permitió llegar acá con la moral muy arriba, y ellos también sintieron ese golpe. Feliz, contento, el año pasado me emocion[e un poco por lo que venía de vivir por el tema de la pandemia, pero ahora lo disfruté, quiero llegar ya a Conce para celebrar y festejar con la familia", expresó a la transmisión oficial un emocionado y ahora bicampeón, Evandro Arteaga.
"Veníamos a este partido con la moral muy en alto tras ganar el quinto juego, eso fue un aliciente muy importante".
Evandro Arteaga,, jugador UDeC.