Atípico ejemplar de zorro culpeo causó sorpresa en Río Clarillo
El animal tendría una rareza genética llamada leucismo, la que explicaría la pigmentación blanca en su cara.
Natividad Espinoza R.
La pigmentación blanca presente en gran parte de su cara, además de su contextura gruesa, patas cortas, orejas muy peludas y ojos y hocico diferentes a los que se acostumbra ver en los miembros de su especie, hicieron que un zorro culpeo causara sorpresa entre los guardaparques del Parque Nacional Río Clarillo.
El animal fue detectado durante una revisión de los registros de las cámaras trampa del parque, es decir, de aquellos instrumentos que se usan para capturar imágenes fotográficas de animales en estado salvaje.
Tras un análisis del avistamiento por parte de varios expertos, se determinó que la criatura corresponde a un zorro culpeo (Lycalopex culpaeus). Eso sí, con una condición llamada leucismo.
De acuerdo con la guardaparques de la Corporación Nacional Forestal (Conaf) y encargada del Programa de Diversidad de la Naturaleza del Parque Nacional Río Clarillo, Catalina Parra, "se trataría probablemente de un caso de leucismo parcial o incompleto, una rareza genética motivada por un gen recesivo que modifica el color del pelaje de los individuos en la naturaleza".
"No se debe confundir con el albinismo, donde los ojos de los animales se tornan rojos y más sensibles a la luz del sol, debido a la falta total de melanina", añadió la funcionaria del parque ubicado en la comuna de Pirque.
No obstante, para confirmar su condición aún falta hacer un análisis genético.
El primero en chile
El hallazgo de este zorro es el primero de su tipo en Chile, puesto que nunca antes se había visto a un ejemplar de su especie con una morfología distinta y una pigmentación blanca en algunas partes del cuerpo.
El hallazgo de este animal, que fue captado por una cámara en julio del año pasado, motivó al jefe de la Sección de Monitoreo e Información del Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas del Estado, Diego Valencia, a destacar que "la esperanza de vida de este zorro en la naturaleza no se vería alterada por esta particularidad genética". Sin embargo, subrayó que este individuo -que luce sano- mantiene las mismas amenazas que los demás zorros que transitan por el parque, "siendo su principal amenaza la presencia de perros (Canis familiaris) sin una tenencia responsable, pues estos deambulan libres y pueden transmitir enfermedades a los zorros, además de desplazarlos o atacarlos directamente".
Por ello, Valencia enfatizó en que "es necesario que cada persona se haga responsable de sus mascotas y que recuerden que no está permitido el ingreso de mascotas a las áreas protegidas administradas por Conaf".
"Se trataría de (...) una rareza genética motivada por un gen recesivo que modifica el color del pelaje.
Catalina Parra, guardaparques de Conaf