Suspenden tres servicios del Biotren tras el rayado a carro
Vandalizaron otra vez una de las máquinas y eso causó que 3 servicios de pasajeros fueran suspendidos.
Molestia generó entre los pasajeros ayer la repentina suspensión de 3 servicios del Biotren, luego que desconocidos rayaran uno de los carros nuevos, que se encontraba en Coronel.
El acto vandálico ocurrió durante la madrugada y desde la empresa indicaron que por un tema de protocolo interno se trató de subsanar el problema limpiando de manera oportuna la máquina, lo que no se pudo concretar y eso forzó que se suspendieran 3 salidas entre Talcahuano y Hualqui.
Pedro Baeza, gerente de Operaciones de EFE, indicó que "sufrimos el rayado de uno de nuestros equipos nuevos. Se intentó hacer una limpieza, pero preliminarmente no se logró el objetivo deseado y preferimos no dañar el chasis del carro".
Agregó que "esto nos obligó a suprimir tres servicios de la línea uno del Biotren, lo que por supuesto lamentamos. El costo monetario por cada vez que rayan un tren es cercano a los $500.000".
Desde la empresa confirmaron que en lo que va de 2021, éste es el caso 25 y 5 veces los rayados han sido a los trenes nuevos.
"Insistimos que esto perjudica a nuestros usuarios y tenemos una carpeta con cada uno de estos eventos, los que están en manos del área legal, para perseguir a los responsables de estos daños indeseado. También estamos trabajando en buscar algún dispositivo tecnológico que nos permita grabar estos hechos para poder identificar a los responsables", señaló el ejecutivo.
Pasajeros
La suspensión y el motivo que aludió EFE provocaron varias reacciones de los usuarios, quienes en parte solicitaron mayor seguridad para evitar estos rayados y cuestionaron que el protocolo de limpieza implicara suspender los recorridos.
"Cuando hay un accidente en la línea férrea uno entiende que el servicio se suspenda, porque no hay nada que hacer ahí. En este caso es diferente, porque se privilegia limpiar una máquina a que los pasajeros puedan ocupar el servicio con normalidad. Acá, por unos pocos, paga el pato el resto y si el tema de los rayados es tan complejo, entonces deberían mejorar la seguridad en los lugares donde quedan los carros", indicó Pablo Velásquez, trabajador que ocupa el Biotren regularmente.
Magdalena Baeza, estudiante que utiliza el servicio de Lagunillas a Concepción, indicó que "se comprende la molestia de las personas, pero más allá de criticar a la empresa hay un problema cultural de fondo. Si bien uno supone que el tren puede funcionar igual con el rayado, no corresponde que personas hagan estos actos vandálicos, porque perjudican a todos".
"Se intentó hacer una limpieza, pero preliminarmente no se logró el objetivo y preferimos no dañar el chasis".
Pedro Baeza,, gerente operacional de EFE