Luchadores locales cuentan los días para saltar otra vez al ring
Desde que inició la pandemia, la lucha libre penquista de "Acción sin Límites" quedó prácticamente en el aire. De todas maneras, los protagonistas confían en un pronto pero seguro regreso al cuadrilátero, con presencia de público.
Hasta la llegada de la pandemia, la lucha libre penquista era un espectáculo que congregaba, a lo menos, a 200 personas en promedio por jornada. Hoy, a casi año y medio del arribo del covid-19, la incertidumbre es la mejor definición para este show que se niega a morir en Chile y Concepción.
Bajo curiosos nicknames, los luchadores han seguido entrenando -dentro de lo posible- en sus hogares. Por supuesto, no es lo mismo que hacerlo en un gimnasio, como lo solían hacer anteriormente. Un caso es el de Chuck Falcón, quien cuenta sobre los grandes avances que alcanzaron hasta que el coronavirus arribó.
"En octubre del año antepasado abrí una academia de lucha, que tenía bastantes alumnos. Estaba full. Con la pandemia dejamos de hacer las clases, porque son muchas limitantes para los deportes, sobre todo de contacto. Paramos y así también los eventos", lamenta quien, además, es ingeniero en biotecnología.
A ello agrega que "ahora estamos en un paréntesis, sin embargo, se está comenzando a mover la maquinaria para conseguir lugares. De hecho, todos estos espacios los cerraron, como por ejemplo el Elite Training Center, en Ongolmo con Ventus (...) Teníamos todo en ese galpón, pero la pandemia obligó a cerrarlo y sonamos", explica.
Vale recordar que eran al menos dos lugares que habitualmente albergaban estas veladas de wrestling. Uno de ellos era el liceo Juan Martínez de Rozas, como así también el gimnasio Condell, ubicado en Bulnes, entre Galvarino y Ainavillo.
Lo extrañan
Como buena lucha libre, una de las principales características que posee ASL se relaciona con la gran interacción con el público. De hecho, los propios protagonistas asumen que será difícil regresar al ring con un aforo reducido. Si es que se logra, claro está.
"La lucha sin público es un espectáculo totalmente distinto. A diferencia de la WWE, ellos poseen la tecnología para llevar gente a los shows. Por nuestra parte, nosotros vivimos de ello y de las reacciones que se provocan en cada combate, pero en este contexto es complicado", apunta el luchador Amadeo Borges.
"Es lo mismo que el fútbol sin público, pues pierde esa chispa de gritar y emocionarte. Ese tipo de cosas uno lo echa de menos, más todavía porque se trabaja para que la gente reaccione, no tanto para que el movimiento salga más bonito", añade quien también fue campeón en parejas del ASL 1.
"Nosotros llevamos 10 años en Concepción. Si bien al inicio fue complicado, entre 2015 y 2016 hubo un boom en las luchas, hasta que subimos los números de nuestro público. Tanto así que algunos luchadores de acá y Santiago se han ido a Estados Unidos a entrenar, lo que dice que hay otra visión de este deporte. Y si mejora el producto, la gente va y paga", comenta Chuck Falcón.
En esa línea, detalla cifras más que interesantes. "Una vez alcanzamos a tener 400 personas en un evento grande, mientras que en los más pequeños nunca bajamos de las 180. En el último año antes de la pandemia igual tuvimos nuestro público fiel, se llenaban los gimnasios. Se fue agrandando la familia. Y es que, con más dinero, mejor producto para ofrecer", sostiene.
Lamentablemente, todo indica que esos momentos estarán lejos de repetirse. Consultado por cómo se podrá laborar en un contexto pospandémico, es sincero al decir que "así como trabajamos, no nos saldrá a cuenta. Pero siempre está la opción de hacer algo grabado, aunque se necesitan auspiciadores. Por ejemplo, en Santiago, los chicos de CNL montaron una webserie, pero con financiamiento externo".
Finalmente, no esconde sus ganas de regresar, una vez más, al cuadrilátero. "Esperamos ansiosos que esto pueda volver a una cierta normalidad. Esto cambió nuestras vidas. Uno tiene tristeza por no hacer lucha, pues a nosotros nos llena el alma. Esto es un espectáculo que nace por amor al arte, al menos en Chile. Acá tenemos profesiones y no esperamos vivir de la lucha, pero igual lo hacemos", concluye Borges.
"Acá cada uno tiene profesiones. No esperamos vivir de la lucha, pero igual lo hacemos".
Amadeo Borges,, luchador Acción Sin Límites