Escuelas especiales y su desafío diario en la "educación online"
Desde los establecimientos aseguran que es de vital importancia el apoyo y contención de los apoderados en el hogar. Asimismo, la brecha digital se hace más notoria que nunca.
La pandemia del Covid-19 trajo consigo una serie de nuevos hábitos y conceptos que la gente debió incorporar a su día a día, como por ejemplo, el de educación online o a distancia, que se volvió muy popular en el último tiempo. Bajo ese contexto, las escuelas diferenciales han tenido que afrontar nuevas dificultades y desafíos.
Y es que si bien desde el Gobierno todavía no le colocaron fecha al retorno presencial a las aulas, desde estos establecimientos se mantienen a pie del cañón para no quedar atrás con los contenidos.
Uno de los recintos educacionales que continúa con clases remotas es la Unidad Educativa Los Aromos, perteneciente a la Fundación Coanil Hualpén. Del lugar cuentan que siguen todos los lineamientos del Ministerio de Educación, pero que inexorablemente, desde el inicio del confinamiento, los retos han sido de ribetes mayores.
"Como todo colegio, las clases se encuentran suspendidas. Una vez que inició todo esto, hemos experimentado cambios profundos, pero de alguna u otra forma nos las arreglamos para dar cumplimiento con nuestros queridos estudiantes, que para nosotros es lo principal", explica la jefa UTP, Karla Mora.
En esa línea, la funcionaria revela que, cuando comenzó la emergencia sanitaria, como establecimiento realizaron pesquisas para tener un panorama más acabado de la situación que viven los escolares. Lamentablemente, aquí se hallan algunas piedras en el camino.
"Ha sido súper complejo y creo que no hay mucho punto de comparación con las otras escuelas más convencionales, lo que dificulta el proceso. Hay que tener en cuenta que nuestra población tiene un alto índice de vulnerabilidad, donde no todos tienen acceso a Internet. Con ello, la falta de herramientas de los apoderados también ha complicado mucho esta situación", revela la autoridad de la escuela.
Instituto down
Por su parte, desde el Instituto Down de Concepción la situación no es menos distinta. Su propia directora Fabiola Vallejos reconoce que han sido tiempos difíciles, donde el apoyo familiar de los alumnos es clave para su aprendizaje.
"Nosotros atendemos a niños de 0 a 15 años. Por lo mismo, los más chiquitos necesitan estimulación temprana. Debido a ello es que al facilitar plataformas remotas, involucramos a la familia para que cumplan con las tareas que les asignamos a los alumnos",
Por lo mismo, agrega que "la contención emocional que se les ha dado a los apoderados ha sido fundamental desde el día uno. Es importante que sepan que están con nosotros para lo que sea, pero que también su función es valiosísima con sus pupilos".
Coalivi
Tal como muchos podrían pensar contrariamente, en la Corporación de Ayuda al Limitado Visual se sigue a full con las clases. Patricio Parada, director del Centro de Educación y Rehabilitación Integral Coalivi en Concepción, cuenta que este periodo de cuarentena ha estado cargado de desafíos, los que en conjunto se han tratado de sortear.
"Hay niños que por su tipo de ceguera y discapacidad, necesitan trabajos muy personalizados y directos, donde el equipo profesional debe estar con ellos de forma individual. Ahora con la pandemia, hemos estado muy aliados a lo que son los padres, madres, hermanos o alguna figura significativa dentro de la casa, para que puedan cumplir con los ejercicios que les estamos enviando", expresa el administrador.
En ese contexto, Parada asegura que "hemos tenido una buena respuesta desde las casas de los alumnos, principalmente porque siempre estamos permitiendo que algún familiar ingrese a las clases, para que vean qué es lo que se realiza".
Eso sí, también hace hincapié en la difícil situación económica que atraviesa la fundación, por lo que hace un llamado a donar dinero o hacerse socio. "Con el estallido social tuvimos muchos problemas para abrir nuestra óptica. Ahora con la pandemia se nos ha hecho muy difícil, pues tuvimos cerrado casi 2 meses y medio. Por ello es que pedimos ayuda gubernamental, o que también la gente pueda aportar a esta causa", cierra.
"Nos las arreglamos para dar cumplimiento con nuestros queridos estudiantes"
Karla Mora,, Coanil
"La contención emocional que se les ha dado a los apoderados ha sido fundamental"
Fabiola Vallejos, Instituto Down.
"Hemos tenido una buena respuesta desde las casas de los alumnos"
Patricio Parada, Coalivi