Cocinar en días de pandemia
Investigaciones realizadas sobre los alimentos demuestran la importancia de su unión ¿Por qué se debe poner cebolla a la salsa de tomate? esto no es por seguir una simple receta italiana, sino que se ha demostrado que la cebolla potencia las propiedades antioxidades del sofrito. En concreto, mejora la isomerización (transformación y absorción) del licopeno, el pigmento que da el color rojo a los tomates y que está considerado uno de los antioxidantes naturales más potentes.
Estas propiedades ayudan a prevenir el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, diabetes, ciertos procesos cancerígenos, principalmente, a nivel de tejidos epiteliales), entre otras enfermedades. Pero además, la cebolla suma a los antioxidantes del tomate, que son los flavonoides, esto son unos potentes agentes a la hora de inactivar los radicales libres o contrarresta metales prooxidantes como el hierro y el cobre, con lo que mejora la cantidad y biodisponibilidad de compuestos saludables en el sofrito.
Respecto al tipo de cocción también hay una razón. Diferentes estudio revelan que el tiempo de cocción es importantes. A más tiempo de cocción de la cebolla, estos antioxidantes son más biodisponibles y más beneficioso.