Leo Riquelme C.
El Gobierno chileno se sumó a una iniciativa impulsada el fin de semana por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, y llamó ayer a la población a usar mascarillas cada vez que deban circular por zonas de alta afluencia de gente, para evitar contagiarse de coronavirus.
Por lo mismo, el Ministerio de Salud chileno difundió un esquema para que las personas puedan hacerlas en sus casas con bufandas, bandanas, pañuelos o poleras, asumiendo la falta de disponibilidad que hay de aquellas mascarillas que garantizan la no transmisión del microbio.
El ministro Jaime Mañalich aseguró que tienen stock "suficiente" para abastecer de mascarillas quirúrgicas y N95 al personal de salud, pero, agregó, "no tenemos mascarillas para distribuir al total de la población, no podemos entregarle a cada persona que va a viajar en el Metro este lunes una mascarilla, porque no las tenemos".
La autoridad pidió que se usen cada vez que se deba salir para realizar compras, hacer trámites bancarios o sostener reuniones con otras personas.
Uso de cubrebocas
El secretario general del Colegio Médico, José Miguel Bernucci, dijo en radio Cooperativa que, si bien la evidencia científica aún no es concluyente, apoya la recomendación de uso de estos elementos para cubrir nariz y boca sobre todo porque hay personas "asintomáticas" (es decir, que portan el virus pero no han padecido fiebre, dolor de cuerpo o tos) y pueden esparcir el Covid-19 a través de las micro gotas que emiten al hablar. Sin embargo, añadió, estas mascarillas deben cumplir con "ciertas especificaciones".
Los expertos, no obstante, recordaron que quienes han dado positivo al virus deben obligatoriamente quedarse en casa; en tanto que el resto de la población debe evitar exponerse y, de tener que hacerlo, debe velar por mantenerse al menos a un metro y medio de otra persona. (Ver en página 14 artículo en que expertos enseñan la forma correcta de ponerse una mascarilla).