Alfonso Levet G.
Las agresiones a profesores, por parte de alumnos y apoderados, se ha ido tornando en algo cada vez más frecuente, según han comunicado los propios docentes a las distintas instancias del Colegio de Profesores de la región del Biobío.
A juicio de la docente María Victoria Peralta, Premio Nacional de Ciencias de la Educación 2019, la violencia entre alumnos, o hacia los docentes, no son más que un reflejo de la sociedad actual.
"Las aulas no son una burbuja, lo que sucede afuera pasa adentro; tenemos a algunos jóvenes que han perdido los referentes y liderazgos positivos o sus familias están muy agobiadas y hay poco tiempo para ellos; eso tiene distintas expresiones", sostuvo la académica de la Universidad Central.
Acerca del momento en que se comenzó a perder el respeto hacia los profesores, aseguró que es difícil de identificar. "Creo que algo está fermentando, porque los problemas de la sociedad son estrés y agresividad en todos los planos, estamos viendo síntomas por todas partes, y los jóvenes son parte de eso", planteó.
La experta propone "preguntarse por qué lo hacen, aunque sea doloroso. Si queremos solucionar el problema hay que investigarlo".
Consultada por posibles soluciones, afirmó que "tenemos mucha necesidad de líderes positivos y referentes, para que la juventud encauce sus caminos, por ahí veo el tratar de avanzar".
Realidad en la región
En tanto, Aníbal Navarrete, secretario regional del Colegio de Profesores Biobío, recalcó que "las agresiones a los profesores y los problemas con los apoderados, es una realidad constante en la región".
El dirigente de los profes confidenció que "ya no se trata de si uno tiene miedo en la escuela, ya da miedo caminar de la escuela a la casa (...) el espacio de trabajo debería ser seguro, pero hemos visto que con el tiempo se ha ido perdiendo esa seguridad que te daba el estar dentro del aula".
Incluso, aseguró Navarrete, "tenemos casos que han terminado hasta judicializados, como un caso en el liceo Brasil".
Según la visión que tienen en el magisterio, explicó Navarrete, "si existe mayor violencia en todos los espacios, eso también se traslada a las escuelas, es como una efecto dominó que se ve reflejado en los establecimientos".
Si bien en la provincia de Arauco las agresiones a los educadores no ha sido algo frecuente, sí es un fenómeno que se ha visto.
Así lo manifestó la presidenta del Colegio de Profesores de Arauco, Nancy Reyes, quien relató que "hace poco tuvimos el caso de un inspector que fue violentado por un alumno; vino Carabineros, al alumno lo expulsaron del liceo, y lo cambiaron de establecimiento".
Según relataron sus propios colegas, el inspector "estuvo una semana con licencia; no con daño físico, pero sí emocional", contó Reyes.