El sismo del domingo fue una réplica tardía
El sismo de magnitud 6,6° que se sintió el domingo no tiene la capacidad de liberar energía suficiente para evitar que se produzca un sismo mayor en 70 a 100 años en la misma zona, aclaró ayer el geofísico de la UdeC Arturo Belmonte-Pool. El experto explicó que ese sismo, por la ubicación de su hipocentro y el año en que ocurre, se le puede denominar "réplica tardía" del terremoto de 2010.
"Este tipo de sismos ocurren cada 7 a 10 años en la zona centro sur de Chile, son completamente normales y no corresponde a un precursor de un terremoto mayor", aclaró.
Pero tampoco evita que en décadas más adelante se vuelva a producir un sismo importante en esta área, debido a que "es unas 1.000 veces más pequeño que un terremoto 8,8, su magnitud debió producir un deslizamiento entre las placas de unos 30 centímetros mientras que el de 2010 generó deslizamientos de hasta 15 metros. Por tanto, la energía que liberó este sismo es ínfima respecto a ese futuro sismo mayor y que se sigue acumulando por la subducción permanente de las placas tectónicas", dijo.
Añadió que los sismos que sí representan una mayor incógnita son los denominados de intraplaca, es decir, que se producen por fracturamiento interno de la Placa de Nazca, y no provocados por el contacto entre las placas tectónicas de Nazca y Sudamericana.
6.6 grados Richter fue la magnitud del sismo que se produjo el domingo en la zona.