Puestos en la nueva región de Ñuble atraen a los penquistas
La creación de la XVI Región ha hecho surgir la idea de que los cupos de trabajo en el aparato público chillanejo se verían incrementados. La Estrella habló con penquistas que ya laboran en el sector y cuentan sus experiencias.
El nacimiento de la Región de Ñuble ha generado la idea de que junto con ella crecerían los puestos de trabajo en las oficinas públicas chillanejas y en las capitales provinciales de Diguillín (Bulnes), Itata (Quirihue) y Punilla (San Carlos). Lo cierto es que a nueve días de entrada en vigencia el decreto promulgatorio que la creó como tal, recién se inicia el proceso que eventualmente podría desembocar en un aumento de funcionarios públicos.
La Estrella habló con penquistas que ya trabajan en oficinas públicas chillanejas y recorrió los pasillos del edificio del Gobierno Regional de Ñuble. En ellos, hoy solo hay maestros, haciendo las terminaciones de las oficinas, las cuales, quizás, dentro de poco, estén ocupadas por profesionales oriundos del Gran Concepción.
Viajes diarios
José Miguel Muñoz, es constructor civil, trabaja en el Servicio de Salud Ñuble y vive en San Pedro de la Paz. "Mi llegada a Chillán se gestó tras un aviso en que había una vacante para inspeccionar la construcción de un cesfam. Pasé por todo el proceso de postulación y quedé", señala a La Estrella.
"Estuve cerca de un año y medio en ese empleo y luego volví a Concepción, porque encontré un trabajo acá más cerca, pero en éste último no tuve buen resultado. Gracias a mi buena labor en Chillán se dio la posibilidad de volver y regresé en enero pasado", explica.
Respecto al viaje, José Miguel señala que se demora una hora con veinte más o menos. "Me levanto a las cinco treinta de la mañana, tomo el bus de las seis treinta y cinco, llegó a las ocho a Chillán y marco tarjeta a las ocho diez en la Dirección del Servicio de Salud", añade.
"Para mí no ha sido complicado viajar, porque ya estoy acostumbrado a madrugar. La clave está en acostarse temprano", sentencia a La Estrella.
-¿Ha pensado en trasladarse a vivir a Chillán?
"Me gusta Chillán, porque es una ciudad en donde algunos precios son más baratos en relación a Concepción, está todo más cerca y los trayectos son más cortos. Vivimos en San Pedro de la Paz (Idahue) y mi esposa tiene trabajo acá, entonces nos complica por ese lado", puntualiza.
Una situación similar es la que vive a diario Alfredo Valderrama, quien también viaja de lunes a viernes a Chillán para cumplir con sus obligaciones laborales. "Esto de tener que andar todos los días en bus, al principio fue un poco complicado, pero uno ya se acostumbra", manifiesta.
"Vivo en el centro, cerca del (instituto) Virginio Gómez, me levanto a las cinco y media de la mañana, tomo una micro al terminal y de ahí a Chillán. Viajo siempre en los buses Biobío y ellos dan la posibilidad de comprar una cuponera que tiene un precio más bajo. Así me sale a $2.000 el pasaje y el normal sale $3.000. Con eso se economiza un poco. En la tarde salgo a las cinco y cuarto, por lo que estoy cerca de las siete y media en mi casa", agrega.
Acerca de la posibilidad de trasladarse definitivamente a Chillán, Alfredo sostiene que no lo ha hecho, porque tiene familia y su esposa trabaja en Concepción. "Tenemos que compatibilizar eso, por eso hago el sacrificio de viajar todos los días", explica el informático, encargado de soporte del Servicio de Salud Ñuble.
Cajera
"Entre las seis y media y las ocho de la mañana es la hora en que más gente llega a tomar el bus que va para Chillán. La gente que va a trabajar para allá son siempre los mismos. Se repiten las caras. Hay gente que compra todos los boletos una vez por semana", señala Jocelyn Muñoz, cajera de Buses Cinta Azul.
A diferencia de José Miguel y Alfredo, José Uriz, supervisor de la Provincial de Educación de Ñuble y coordinador del Territorio de Diguillín, decidió emigrar de San Pedro de la Paz y trasladarse a Chillán.
"Me vine el primero de octubre de 2015 a Chillán. Llevo casi tres años acá y me vine por un concurso público, postulé allá en Concepción y lo había hecho para ir a Arauco y Los Ángeles. Por un tema de calificación me ofrecen venir a Ñuble sin haber ofrecido como opción el venir para acá. Me vengo sin conocer nada de Ñuble. De hecho no sabía que había comunas como Ñiquén, San Ignacio, El Carmen, etcétera", manifiesta.
"Desde la visión penquista no se dimensiona el grado de ruralidad que existe en Ñuble. A mí me toca ver la provincia de Diguillín por ejemplo. El Carmen y Pemuco son comunas que, por ejemplo, no tienen semáforo ni cajero automático. El tema de la conectividad y la infraestructura vial es muy deficiente. La gente cree que Concepción y Chillán están muy próximos y si lo están por la carretera. En una hora y media estás allá, pero en auto te gastas veinte lucas. Es lo mismo que gastas hacia Santiago", sostiene.
El clima
Uriz señala que para los penquistas los veranos ñublesinos son tremendos. "Para los días de los incendios forestales tuvimos que ir a San Fabián de Alico con 43 grados. De hecho, una de las cosas a las que más me ha costado acostumbrarme es al clima. Cuando voy a Conce, a mi San Pedro querido, no se compara con el calor de acá", sostiene el profesional que viaja todos los fines de semana de Chillán a Concepción.
Dirigente anef
Patricio Peña, presidente de la provincial Ñuble de la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (Anef), dijo que "efectivamente hay gente del ámbito público que trabaja acá y que tiene su residencia en Concepción y no solo hay gente de Concepción, también hay personas de la provincia de Biobío".
"Pienso que de abrirse nuevos cupos laborales, por Ñuble Región, deberían ser para gente de la zona o de la provincia. Aquí hay gente que está capacitada para trabajar en el sector público y además, porque conocemos la realidad de acá, conocemos la ciudad, sus problemas", asegura el dirigente de la Anef.
"Me gusta Chillán, porque es una ciudad en donde algunos precios son más baratos en relación a Concepción"
José Miguel Muñoz"
"Desde la visión penquista no se dimensiona el grado de ruralidad que existe en Ñuble".
José Uriz"
5.30 horas de la mañana se levantan algunos penquistas que trabajan en la vecina Chillán.
40 grados de temperatura llegan a existir en algunas zonas rurales de la Región de Ñuble.