Alfonso Levet G.
El concejal Joaquín Eguiluz pidió que la Contraloría revise las bases de licitación para la "Concesión para producción de Fiestas Patrias 2018", que fue aprobada por el concejo municipal el 16 de agosto pasado.
La concesión fue adjudicada por $1.200.000 al productor Oscar Cravero, único oferente de la licitación, que tenía como piso mínimo $1.000.000.
"No tengo certeza de cuantos stands son y si el cobro de ellos está fijado en las bases; lo que pedí es que revisen la licitación, a ver si cumplen con los estándares para cumplir con la transparencia", detalló el concejal.
Eguiluz, que votó a favor de la adjudicación, afirmó que "asumo mi responsabilidad, porque voté a favor, pero al revisar después con más detalle la confección de las bases, más que la adjudicación, me merece algunas dudas".
Municipio
El alcalde Álvaro Ortiz declinó referirse al tema y fue el administrador municipal, Aldo Mardones, quien dijo que "lo que se busca con establecer un piso mínimo ($1.000.000) es incentivar la participación de la mayor cantidad de oferentes".
"Aún así, participó un solo oferente, que ofertó, aparte de toda la producción del evento, $1.200.000, en pago directo al municipio", explicó Mardones, y aseguró que "el alcalde ni siquiera participó de la votación de la adjudicación".
Explicó además que los valores de la licitación pública se han mantenido bajos en los años recientes, y que "este modelo de concesión viene del año 2000, por lo que nos llama la atención que se cuestione después de 15 años".
Mediante un comunicado firmado por los tres miembros de la comisión evaluadora que resolvió la licitación, éstos afirmaron que "se llevó a cabo de manera transparente y seria por parte de los tres funcionarios de planta que la conformaron, quienes tienen más de 20 años de experiencia en dicho servicio público".
El adjudicatario
El comerciante adjudicatario, Oscar Cravero, dijo a La Estrella que "la licitación la gané en buena lid y cumplí con todos los requisitos, no es mi culpa ser el único oferente".
Cravero, que ahora debe buscar comerciantes para los distintos espacios que tendrá el recinto, afirmó que "el stand más barato vale $238.000, hay de $476.000 y también hay de cocinerías por $1.554.000 y dos o tres espacios grandes que valen más de $2.000.000".
El comerciante penquista explicó que "hay una gran inversión en una producción así, en seguridad, electrificación, baños, seguros, carpas y aseo, entre muchas otras cosas, si fuera tan fácil, yo sería millonario (...) pero hay bastante interés de gente que ya ha trabajado conmigo".
238 mil pesos costará a los comerciantes interesados el stand más barato en las ramadas.