Desde el 2013, todos los mayores de 18 años son considerados presuntos donantes en Chile, a menos que expresen su voluntad de no serlo mediante notario. En la medida que exista alguna duda de si el fallecido es donante, son los familiares quienes toman la decisión final. En menores de edad, la decisión de ser donante es de los padres.

En 2017, el número de donantes se ha elevado, si se compara con años anteriores.

Es importante este hecho puesto que las cifras siempre han estado muy por debajo de lo que se necesita. Cabe recalcar que actualmente hay cerca de 2000 personas en espera por un órgano.

Los motivos de este crecimiento son multifactoriales, y se deben a la disminución de la negación de los familiares; campañas de concientización y sensibilización a través de los medios; inyección de recursos por parte del gobierno, lo que en parte se tradujo en un aumento de procuradores de órganos trayendo como consecuencia el aumento en la pesquisa de posibles donantes de órganos en los hospitales; y cambios culturales en la población Chilena que han permitido que el número de donantes efectivos crezca.

Si bien, aún queda mucho por hacer, creo que este 2017 nos ha mostrado que como sociedad podemos seguir avanzando en una cultura de donación de órganos que nos permita cubrir la demanda en Chile.

Concepción

Talcahuano

Tomé

Cañete

Arauco

Curanilahue

Lebu