"La vida de Nicol": la ilustración que llega en libro
Nicol Sepúlveda, de Concepción, tiene uno de los personajes más queridos del país, cuyas historias, hasta el domingo, sólo eran contadas en Facebook.
¿Edad? 30 años, soltera y un gato. Así se define Nicol Sepúlveda, ilustradora de Concepción y kinesióloga de profesión, quien este domingo logró darle un salto a "La vida de Nicol" desde su Facebook (donde la siguen más de 240 mil personas de Chile y el mundo) a un libro, lanzado en la Filsa.
¿Expectativas? "Quiero disfrutar mi momento de dar este paso, de salir de internet, de llegar a la gente de manera más cercana. El libro está pensado para mis seguidores, porque tiene hartas historias nuevas y también para que otras personas conozcan mi trabajo. Quiero que la gente lo disfrute, se ría y pase un buen momento con éste", dice.
La idea del texto siempre la tuvo. Cuando se consolidó su trabajo, dijo que era el momento. "No soy una persona de rutina y mi trabajo se había vuelto así. Me dieron ganas de dar un paso más grande", relata sobre el libro que hizo en tiempo récord: 3 meses.
-¿Nos sentiremos identificadas?
"Sí, yo espero que sí. Ella no responde al estereotipo de mujer, no hace lo que hacen todas. Creo que ese tipo de mujer se identificará".
Innato
Siempre le gustó dibujar. Es más, recuerda que desde chica hacía un cómic y que siempre que llegaba al colegio sus compañeras no le decían hola, sino que le preguntaban si había avanzado en él.
Pero a la hora de estudiar, sus papás la instaron a seguir una carrera formal. Si quería después, podría estudiar algo relacionado con el arte.
"Me gustaba mi carrera, siempre dibujaba a mis compañeros, a mis profes. En la clase no tomaba apuntes, sino que dibujaba. De repente uno tiene talento y no los ve (...) Cuando salí de la U, me puse trabajar y me di cuenta que había cosas que no me apasionaban. Me gustaba ir y ayudar a la gente, pero el tema de la rutina, de hacer siempre lo mismo, me empezó a enfermar. Ahí me replanteé todo. Pasé por un momento heavy en mi vida, me vi sola y me reencontré con el dibuje. Me compré un día cosas para dibujar, porque lo había dejado botado", relata.
En ese momento se dio cuenta que era algo terapéutico para ella. Sintió unas ganas impresionantes de aprender... desde ese instante el 2012, no dejó de dibujar.
Agrega que "comencé a publicarlo en inglés, en una página de artistas, porque mi estilo era diferente. Más adelante, decidí hacer algo con mis dibujos: dibujar trabajando. Así se me ocurrió hacer tazas y carcasas. Eso lo hago desde 2014. Postulé al Sercotec y con unos ahorros hice mi taller en mi casa".
De ahí, vio cómo promocionarse para vender. Se le ocurrió crear un personaje para Facebook, para que la gente se riera, compartiera su trabajo. "Quería buscar mi sueño de vivir dibujando", dice.
-¿Nicol eres tú?
"Principio no era yo, sino que un personaje mujer. Inconscientemente le dibujaba el pelo largo y mis amigas me decían que era como yo. Que era mi vida, que así era yo. Así que ahí dije que se llamaría Nicol. Claro, me inspiro en mí para hacer el personaje, pero hay varias cosas que exagero, invento, no dibujo literalmente lo que pasa.
-Los diálogos son muy chistosos…
"Al principio mis dibujos eran bonitos, complejos, pero me faltaba unir mi personalidad con lo que estaba haciendo. Cuando creé el personaje fue el vehículo para unir mi personalidad con mi sentido del humor, que lo tenía aparte con el arte. Yo siempre fui chistosa, se me ocurren ridiculeces. Con el tiempo y la práctica pude ser capaz de unir ese aspecto de mi personalidad con mis dibujos. El resultado fue increíble, porque la gente le encantó, lo encontraron original".
"Ella no responde al estereotipo de mujer, no hace lo que hacen todas. Creo que ese tipo de mujer se identificará"
Nicol Sepúlveda"