En Los Lirios temen que las ramas de los árboles caigan en sus casas
Los vecinos además denuncian que afectan el tendido eléctrico, y las raíces provocan daños en el pavimento.
Momentáneamente en el pasado están quedando los problemas de las inundaciones para los vecinos de Los Lirios. Sin embargo, ahora son otros los problemas que deben enfrentar en un barrio que tiene mayoría de población de avanzada edad.
La gran problemática que se vive en el sector penquista se debe a los árboles que cubren una gran cantidad de casas de la población. Los vecinos temen por la caída de ramas y reclaman que las autoridades han esperado que pase algo para tomar medidas al respecto.
"Hay algunos árboles que los han cortado, pero es porque la situación se ha vuelto urgente. Porque se han caído ramas o troncos grandes", cuenta Gonzalo Foré, mientras muestra dos árboles que se prolongan hasta su vivienda.
"Gracias a dios no hemos tenido que lamentar accidentes, o que los árboles hayan destruido algo, pero el peligro está latente", añade María Inés Albornoz, que también vive en Los Lirios y sufre cada vez que hay temporales o vientos de gran velocidad.
Tendido eléctrico
Otra consecuencia de los árboles en las veredas, y que sus prolongaciones terminen en las casas, es la obstrucción que sus ramas provocan al tendido eléctrico. Lo anterior provoca cortes de luz, además del inminente peligro tanto para las casas como para las personas que deambulan por el lugar.
"Yo me pregunto ¿Qué hay que hacer para que nos escuchen? Porque hemos ido a hablar con la presidenta de la Junta de Vecinos y a ella tampoco la escuchan", reclama Gonzalo Foré. "Lo increíble es que las autoridades esperan que pase algo para reaccionar, en vez de prevenir", añade el vecino de Los Lirios.
De hecho, entre las ramas de los árboles se enmarañan los cables de la electricidad, generando temor en los vecinos del lugar. "El miedo es que los árboles se caigan en las casas, vehículos o a alguien", explica Maria Inés Albornoz, asegurando que hay varios que están a punto de caerse.
Además, en el sector también se pueden ver postes del tendido eléctrico que están notoriamente ladeados, con claro riesgo de que caigan y puedan causar una catástrofe.
"El daño material no me preocupa tanto, pero si le llega a pasar algo a alguien...", cierra Gonzalo Foré, que reza cada día que hay temporales para que los árboles, postes, y tendido eléctrico no se muevan de su lugar.
Calles y veredas ceden por las raíces de los árboles
Los árboles que están ubicados en las veredas del barrio se han convertido en un dolor de cabeza para los vecinos. Sucede que las raíces han hecho que el pavimento se trice, o derechamente se destruya. La dificultad se vuelve urgente debido a la cantidad de personas de tercera edad que están propensos a alguna caída al caminar por el lugar. "Estas calles están así desde antes del terremoto y aún así no las han venido a arreglar", dice Delfina Gallegos. "Por último que pongan la mitad de la plata y nosotros ponemos la otra mitad", pide ayuda desesperada la dueña de casa.
Hay demanda por las inundaciones
Si bien ya no sufren con las inundaciones en el lugar, los vecinos se juntaron luego del episodio del 2006 para demandar al Estado por los daños. "Ganamos la primera instancia, pero ahora apelaron y el 23 debería haber humo blanco", declara José Vidal, dueño de un minimarket, en el cual perdió toda su mercadería aquel año.
"Las autoridades esperan que pase algo para reaccionar, en vez de prevenir"
Gonzalo Foré"
La voz de los vecinos
José Vidal, dueño de minimarket
"Las calles y veredas acá están así del terremoto y hay gente que se ha caído y todo, pero no han venido a arreglar nada".
Héctor Muñoz, jubilado
"Ayer se cortó la luz por el estado del tendido eléctrico. Los árboles están muy encima y con el viento se tambalean".
Gonzalo Foré, propietario de bazar
"Hay árboles viejísimos que están inclinados y tienen ramas sobre las casas. Hay algunas que se han caído en las calles".
Delfina Gallegos, dueña de casa
"Las calles están mal por las raíces de los árboles, y por los camiones que pasan por el lugar. Han echado asfalto pero no dura nada".