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Un puente entre el mar, la ciencia y la salud mental

"Mar te sana"es el proyecto que se realiza con personas del Club El Amanecer en Penco, donde el conocimiento entrega un efecto rehabilitador, según los participantes.
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Cristian Aguayo Venegas

Con el objetivo de buscar sanar mediante el conocimiento del mar, nació el proyecto "Mar te sana", el cual es una iniciativa inclusiva que une ciencia, arte y salud mental, bajo la guía del Museo de Historia Natural de Concepción, programas de divulgación científica y el Departamento de Oceanografía de la UdeC.

"El nombre fue elegido por las y los integrantes del Club El Amanecer, durante la primera sesión que se realizó en el museo, en la cual exploramos las percepciones en torno al mar", señaló Evelyn Elgueta, encargada del área de Educación del Museo.

"Se trata de un juego de palabras que reúne algunos significados: martes-arte-mar-sana, uno es el día en que se realizan las sesiones, el que sigue es la herramienta de expresión y exploración, el tercero es el eje temático del proyecto, y por último, el efecto que las personas participantes asocian al contacto con el océano", agregó.

Aquel encuentro dejó una huella tan profunda que germinó en la necesidad compartida de seguir construyendo un espacio de aprendizaje y contención emocional.

"Esta experiencia fue profundamente significativa, y a partir de ella surgió consensuadamente la idea sobre la necesidad de mantener un trabajo sistemático con esta comunidad. Y dado que el mar constituye el entorno inmediato a su localidad, se decidió comenzar con el estudio del ecosistema marino", explicó.

"El principal propósito de este proyecto es contribuir al bienestar de la comunidad mediante el arte, la ciencia y el contacto con la naturaleza. Buscar la forma de fomentar la apropiación del territorio, el cuidado del medio ambiente, la creatividad y el fortalecimiento del tejido social", añadió.

"Es acá donde las ciencias del mar nos brindan herramientas para comprender la inmensidad de la vida oceánica, sus condicionantes y sus múltiples interacciones. Por ejemplo, lo que antes estas personas percibían sólo como una superficie de agua, luego de las sesiones, revela su complejidad y riqueza", comentó.

"Conocer estos mundos, desde la biodiversidad del intermareal rocoso, pasando por las aves marinas hasta las profundidades más remotas del océano, no solo maravillan, sino que motivan a protegerlos, haciendo accesible el contenido científico sobre nuestro entorno", aseguró.

Actividades

Evelyn Elgueta sostuvo que "en una actividad inicial de foto provocación, se indagó en las percepciones, dudas y emociones que el mar evocaba en los participantes. A partir de este ejercicio, y en conjunto con el equipo y la profesora de arte del Club El Amanecer, se constituyó el contenido".

"Entre estos destacan, conocer los principios de la cultura oceánica, cuya base radica en que es un solo océano, un sistema interconectado; funcionamientos de las corrientes marinas y su impacto en el clima; biodiversidad; la acuicultura, por ejemplo", dijo.

"Estas temáticas permiten a los participantes acceder a conocimientos, y entender que lo que antes simplemente era "agua", ahora se revela como un universo lleno de vida, relaciones y significados", indicó.

"Así, de acuerdo a estas temáticas, las sesiones integran componentes teóricos, prácticos y artísticos, generando experiencias multisensoriales y significativas", afirmó.

"Uno de los mayores logros ha sido el impacto transformador que genera en las personas. Según sus propias palabras: Donde antes solo veía agua, ahora veo todo un mundo que ni me imaginaba", cerró.