Cómo afecta a las mascotas y de qué manera cuidarlos en otoño
Las temperaturas más frías, los días más cortos y una mayor actividad parasitaria pueden influir en su bienestar.
Ignacio Arriagada M.
Este jueves 20 de marzo, pasadas las 6.00, se produce oficialmente el cambio de estación en Chile. Así, finaliza el verano y comienza el otoño. Al igual que para muchos humanos, esta transición puede afectar a las mascotas tanto en su salud como en su comportamiento y hábitos.
"La llegada del otoño significa una disminución de las temperaturas, un alza de la humedad, los días se hacen más cortos y anochece más temprano. Todos estos cambios repercuten en las mascotas, y más aún en gatos y perros. Para contrarrestar las afectaciones, es muy importante ajustar alimentación, rutinas de ejercicios y cuidados en general", explica a este medio Javier Lillo, médico veterinario de la Universidad de Chile.
Que los cuidadores comprendan, por ejemplo, por qué los factores ambientales de la época que se aproxima altera el bienestar de los animales domésticos es clave para que adopten medidas preventivas que garanticen que la salud de éstos no estará en riesgo.
Cambios y sus efectos
Con el cambio de estación, canes y felinos experimentan la muda de su pelaje para adaptarse a las nuevas temperaturas del otoño.
"Ahora el animal reemplazará el pelaje fino por uno más grueso y tupido, que los protegerá del frío. Lo importante acá es cepillarlos con más frecuencia para ayudarlos a eliminar el pelo muerto y así evitar la formación de nudos y prevenir problemas cutáneos", comenta el especialista.
La época que se avecina también puede conducir a que los animales domésticos sufran de alergias y enfermedades. "Las esporas de moho, el polen de algunas plantas y los ácaros pueden causar reacciones. Las más comunes son que los animales se rasquen más, estornuden más o que tengan los ojos llorosos constantemente (...) Los cambios bruscos de temperatura del otoño y la mayor actividad parasitaria de esta época producen una mayor incidencia de enfermedades. Para ambos casos se recomienda llevar al animal a un veterinario para que les proporcione un método de prevención adecuado. Recordar que cada animal tiene sus respectivos requerimientos", apunta Lillo.
Durante el otoño las temperaturas descienden paulatinamente. Esto podría cambiar el metabolismo de las mascotas, derivando en una ingesta calórica mayor para generar calor, lo que, en algunas ocasiones, podría desencadenar en sobrepeso.
"Si perros y gatos comen más de lo habitual y no se mueven lo necesario, es crucial ajustar las proporciones de comida para evitar que ganen peso. Siempre velar por el equilibrio en este tema", aconseja el médico veterinario.
Por último, en la venidera estación los días se acortarán y habrá más frío. Ambos factores pueden ser un obstáculo para mantener las rutinas de ejercicio de los animales. Sin embargo, enfatiza el experto, se debe garantizar que hagan tales actividades física, puesto que es trascendental para que tengan una buena salud física y mental.
"Si hay una baja temperatura o llueve, optar por paseos más cortos, pero frecuentes. Otra alternativa es jugar al interior de la casa, ya sea con juguetes básicos o interactivos", sugiere.