Jorge Reyes Patuelli

Visiblemente emocionado Ariel Holan se despidió de San Carlos de Apoquindo. El ahora exentrenador de Universidad Católica, acompañado por el presidente de Cruzados, Juan Tagle, y el gerente deportivo, José María Buljubasich, agradeció la oportunidad de volver a la UC y expresó su frustración por no poder levantar una copa nuevamente.

"Estoy emocionado porque quiero mucho al club. Estoy muy agradecido por los jugadores, esto no fue un problema de que el equipo no estaba haciendo lo imposible para sacar esto adelante", sostuvo el técnico argentino, que dejó por mutuo acuerdo la institución ante el mal momento deportivo por el que cruza la Católica.

"Desde el lunes que estábamos de acuerdo que esto era lo mejor para el club y el equipo. Nosotros queremos lo mejor para Católica. Tardamos un poquito porque hay trámites legales que hay que llevar a cabo, no hubo desacuerdos en posturas", agregó.

Según Holan, nunca existieron problemas con la dirigencia de Cruzados. "Siempre que analizamos en las múltiples reuniones, nuestra preocupación era que veníamos de un ciclo súper exitoso, de cuatro campeonatos, y que muchos de esos futbolistas estaban con otros proyectos o deseos de tomar otros rumbos (…) Nunca hubo un reproche de mi parte, sino que creatividad para solucionar la situación, estábamos todos trabajando", dijo.

Buscan reemplazo

Respecto al próximo entrenador, Buljubasich aseguró que están trabajando en que llegue "lo antes posible". "El club hará los esfuerzos para traer al mejor entrenador posible que creamos nosotros dentro de lo que nos pueda aportar. No será por lo económico, sino que por lo deportivo queremos que sea alguien que dé un buen trabajo al equipo. En general, no es que el trabajo era malo, lo que cambia son las expectativas, energías, dinámicas, por lo tanto alguien que continúe el trabajo que venía haciendo Ariel de buena manera", cerró.

El lateral derecho de Universidad de Chile, Juan Pablo Gómez, se refirió al duelo de hoy ante Palestino y a la importancia de seguir sumando en el torneo para así recuperar la confianza en el equipo. "Creo que es necesario ganar para la confianza del equipo, retomar lo que estábamos haciendo y lograr los objetivos de estar en los primeros lugares, como queremos", sostuvo.

Respecto a las características del rival, el jugador de 32 años cree que es "un buen equipo, intenso, tienen delanteros muy rápidos, tendremos que estar atentos en la parte defensiva. Va a depender de lo que podamos hacer arriba y ver si podemos ponernos rápido arriba en el marcador, que es donde nos sentimos más cómodos".

Por la caída ante Unión Española en Santa Laura, Gómez aseguró que ya es cosa del pasado y que siguen adelante para meterse en lo más alto del torneo. "Hay que aceptarlo y tratar de trabajar para mejorarlo, pero es cierto que muchas cosas que normalmente nos salen, no nos salieron y hay partidos que son así, entonces insisto, hay que dar vuelta la página rápido", dijo.

"Hemos ido avanzando todos juntos y eso se ha visto en la tabla, vamos mejorando fecha a fecha", complementó.

En un partido que debió haberse jugado el jueves en Collao, pero que por las lluvias en Concepción se terminó disputando ayer en Rancagua, Ñublense logró el desequilibrio frente a Audax Italiano para avanzar a octavos de final de la Copa Sudamericana.

Un solitario gol a los 50' de Bayron Oyarzo, el único tanto en 180 minutos de drama entre ambos elencos nacionales tras el 0-0 en la ida, permitió a los chillanejos avanzar en la Sudamericana, a la que llegaron tras haber sido terceros en su grupo en la Copa Libertadores.

Audax, que hacía de local, contó con varias opciones de convertir, con Gonzalo Sosa avisando constantemente, pero no pudo ante Nicola Pérez, a la postre la figura del encuentro. La más clara fue un mano a mano entre Sosa y Pérez, que entre el arquero y un defensor rojo sacaron desde la línea de gol.

Los "Diablos" avisaron por medio de Juan Leiva, pero respondió bien el arquero Tomás Ahumada.

Empezando el segundo tiempo, una buena jugada de Manuel Rivera fue finalizada de gran manera por Oyarzo, poniendo en ventaja a los de Jaime García, que se aferraron a esa mínima diferencia ante el asedio audino, que buscó de todas formas igualar la serie y mandarla a penales, pero no lo consiguió.