J. Pablo Fariña López
Preocupación hay entre los trabajadores de la Universidad de Concepción, tras el brutal ataque sufrido por una mujer de 49 años que paseaba unos perros en las cercanías de la Facultad de Biotecnología. Ella fue apuñalada ocho veces por un sujeto que posteriormente fue detenido por Carabineros.
Si bien se trató de un caso puntual en el que el agresor presentaba antecedentes psiquiátricos, durante el año pasado fueron varios los episodios de violencia al interior del campus, donde se vieron riñas entre jóvenes e incluso sujetos exhibiendo armas de fuego a plena luz del día, lo que mantiene alerta a toda la comunidad estudiantil.
Espedio Ibáñez, presidente del Sindicato N°1 de Trabajadores de la Universidad de Concepción, manifestó que "hace mucho tiempo que le informamos a la administración por personas externas y peligrosas que andan en la universidad y les hemos pedido tomar medidas, para la seguridad de los trabajadores, estudiantes y visitantes".
Agregó que "hemos visto mejoras en seguridad y les pedimos un aumento en la dotación de vigilantes".
Sobre un eventual cierre del campus para mejorar el control en el ingreso de personas, el dirigente enfatizó que "la universidad es abierta a toda la comunidad, eso no puede cambiar. Estamos conformes con las medidas que está tomando la administración, sumado a la presencia de Carabineros que son un aporte en las inmediaciones".
Recalcó que "los guardias son parte del sindicato y evidentemente se ven más expuestos, en relación a otros años la situación ha cambiado. Hay mucha gente externa que solo va a hacer daño a la universidad".
Cuidados
Tras lo ocurrido, la Universidad de Concepción informó a sus visitantes que eviten desplazarse por los cerros aledaños al campus, donde es más difícil poder solicitar auxilio en caso de ser víctima de un hecho de violencia o delito.
"Reiteramos nuestro compromiso con la seguridad de las y los visitantes que recorren los espacios abiertos y de uso público. Los cerros circundantes son espacios de acceso restringido únicamente al personal universitario autorizado, por lo que hacemos un energético llamado a no transitar en dichos sectores", indicaron desde la casa de estudios por medio de un comunicado.
Cabe señalar que la oportuna ayuda de transeúntes y los guardias de la universidad permitió auxiliar y llevar a la afectada hasta un centro asistencial cercano, tras ser apuñalada en varias ocasiones. En tanto, el proceso judicial contra el agresor de 33 años fue suspendido, puesto que sería inimputable por enajenación mental. Debido a aquello quedó bajo internación provisoria en la Unidad de Psiquiatría del Hospital Regional bajo custodia de Gendarmería.
"La universidad es abierta y para toda la comunidad, eso no puede cambiar".
Espedio Ibáñez, presidente sindicato n°1 de trabajadores
49 años tiene la víctima del ataque sufrido el fin de semana cuando paseaba sus perros.