3 de 10 repartidoras en Concepción son mujeres
Las penquistas han comenzado a instalarse en este rubro que, si bien, casi un tercio de participación, según una de ellas, se afianza en el tiempo.
Con la llegada de la pandemia, muchas personas tuvieron que buscar nuevas formas de generar dinero y poder mantenerse, fue ahí, donde los delivery de las aplicaciones comenzaron a fortalecerse.
Una de ellas es Daniela Gonzalez, joven penquista que lleva alrededor de 5 meses como repartidora. "Me metí como delivery porque necesitaba unas lucas extras por el tema de la universidad, aproveché que esta pega igual es flexible, y uno va manejando sus propios tiempos. Yo estudio en la semana, y durante el fin de semana trabajo", señaló.
Gonzalez indicó que "es un trabajo tranquilo, y como decía antes vas a tu propio ritmo".
Al ser consultada si había enfrentado alguna situación compleja, la joven penquista comentó que "no, no he sido víctima de nada, a pesar de que soy nueva en el área no he tenido que enfrentar nada malo. Sin embargo, un día tuve un problema con un vehículo, que pasó muy cerca y me golpeó el espejo, pero lo arreglamos rápidamente, sin atados", dijo.
Con respecto al incremento de mujeres en el delivery, Gonzalez señaló que "de a poco se ven más, igual es una pega que no la hace cualquiera, es sacrificada, en mi caso, pierdo los fines de semana, terminó muerta, pero al fin y al cabo vale la pena".
Cabe señalar que, a los repartidores les pagan por viajes y un porcentaje por tiempo y kilómetros.
Valentina Vira, joven de Concepción Centro indicó que "yo llegue por un amigo, quien me comentó mientras hacía el tema de la licencia de conducir y me interesó, además, por mis horarios de la U me acomodaba".
Con respecto al alza de mujeres en el rubro, Vira indicó que "en mi perspectiva son entre el 20 a 30% de mujeres que trabajan en el delivery".
"Pienso que a pesar de ser una zona donde se hace cada día más peligroso trabajar, es un porcentaje bastante alto", aseguró.
En relación a la experiencia obtenida en este trabajo, Vira señaló que "ha sido buena, el delivery te enseña mucho. Eso sí, con el tiempo aprendes a ser tolerante y humilde porque te encuentras con muchos tipos de personas".
Consultada por alguna situación negativa en su trabajo, señaló que "una vez, para mi mala suerte, mientras me encontraba esperando un pedido que aún no estaba listo, me encontré con unos tipos pidiendo plata". "Se acercaban a todas las personas, sobre todo, a las mujeres, así que fui muy precavida, el pedido llegó y me fui al tiro, sin mirar atrás, menos mal no me hicieron nada", explicó.
Asimismo, en relación a la posibilidad de desigualdad dentro del trabajo, Vira afirmó que "no lo hay, ya que nos piden los mismos requisitos para entrar y trabajar, al final, la diferencia se la hace cada uno, ya que hay que manejar muy bien los tiempos".
La joven penquista señaló que "cuando entré, algunos colegas se dieron cuenta que era nueva y comenzaron a darme consejos, me incorporaron super bien al grupo, eso me hizo sentir protegida e incluida siempre".
"Existe una camaradería entre los colegas, siempre está el saludo", finalizó.
30% de las mujeres estarían trabajando en este rubro, al menos, en el centro de Concepción.