Historia del cementerio de San Pedro de la Paz
El primer cuerpo sepultado ahí, fue el de un niño que falleció atropellado por una diligencia de pasajeros que unía a la localidad de San Pedro con el pueblo de Coronel. La dificultad para trasladar un cadáver por el Biobío sería el origen.
Con la fundación hacia 1604 del fuerte de San Pedro, y la línea de la frontera, por el gobernador Alonso de Ribera, se genera una división en Chile entre mapuches al sur del Biobío y peninsulares de la ribera norte del Biobío a Santiago. No obstante, lo anterior, existió un fuerte comercio entre ambas riberas, especialmente con lo que fue los huertos familiares de San Pedro y el pueblo de Concepción, surgido hacia 1751 al otro lado de la ribera de San Pedro de la Paz con motivo del traslado de la ciudad de Concepción al valle de la Mocha.
El cementerio de San Pedro nace producto de un accidente ocurrido en 1899, en el cual un niño es atropellado por la diligencia de pasajeros que unía San Pedro con Coronel y Lota. La dificultad de trasladar un cadáver hacia la ribera opuesta para conducirlo al cementerio de Concepción, trae como resultado que don José Gaete Galdámez, en un acto de beneficencia, entrega un predio de su propiedad para inhumar los restos del menor. Este acto permite que otros vecinos de San Pedro puedan dar sepultura a sus deudos, hasta que en 1905 se produce por primera vez un registro de inscripción según lo detallan los libros del camposanto.
Propiedad
Con el tiempo, el terreno del cementerio que había sido donado sin escritura, pasó a ser propiedad de la Municipalidad de Coronel, luego de la Municipalidad de Penco, y con posterioridad a la Municipalidad de Concepción, para luego, con la creación de la Municipalidad de San Pedro de la Paz, ser entregada a la administración de la naciente comuna. Por ley, una propiedad ocupada como cementerio no puede volverse a ocupar para otro efecto o fin que no sea la inhumación y noble sepultura de cuerpos.
El terreno actual, tiene un ancho de 74,73 metros por 73 metros de largo, sin embargo, los vecinos más antiguos indican el tamaño del cementerio hasta la ribera del río Biobío, y en su ancho, ocupaba el terreno completo de la propiedad donada, que incluía los alrededores donde hoy está la compañía de bomberos y las casas colindantes que rodean el camposanto.
Cabe señalar como algo curioso, que las ventanas de las casas colindantes dan directamente al cementerio, generando una ocupación ilegal, ya que la normativa impide la colocación de cualquier casa o edificio a menos de 50 metros de un cementerio. El problema se fue dando paulatinamente por una ocupación de facto de los terrenos pertenecientes al cementerio y la nula acción de supervisión de la antigua autoridad, dada la distancia que mediaba entre el camposanto y las administraciones municipales que durante años tuvieron su dirección.
Con la inauguración del puente carretero en 1943, y la creación de Llacolén en 1965, se fue expandiendo San Pedro de la Paz, lo que conlleva a que en la actualidad el cementerio cuente con más de mil deudos inhumados en él, considerando que muchos fallecidos se sepultaban en el cementerio general de Concepción. La mayoría de los inhumados en el lugar, corresponden a familias que pertenecían a los huertos familiares de Boca Sur, entre estas podemos encontrar a los Gaete, Poblete, Silva, Gálvez, Salamanca, Rodríguez, Torres, Levancini, por nombrar algunos.
Desconocidas
A pesar de su antigua data, el cementerio de San Pedro de la Paz consta con más del 95% de sus sepulturas realizadas en tierra, por lo que es casi imposible identificar lápidas que den cuenta de su antigüedad, ya que con el pasar del tiempo los deudos van dejando de visitar, y los frágiles cercos de madera y túmulos van desapareciendo, generando la integración de la tierra con el fallecido, perdiéndose así el poder identificar debidamente al ocupante de la tumba, lo que por ley y al paso de los años, vuelve a ser un terreno propiedad del cementerio.
Hoy en día, este campo santo es dirigido por la Municipalidad de San Pedro de la Paz, a través de su Dirección de Salud, siendo su administrador el señor Luis Urrutia Ascencio, quien, en un convenio con gendarmería, logra que reos en reinserción trabajen en el lugar, para limpiar, cortar pasto y ayudar a mantener el aseo y ornato del cementerio, cumpliendo en ello un importante rol social.
Su futuro
No obstante, la existencia de cementerios parque en la comuna, sería conveniente y necesario ir buscando un lugar apropiado para la creación de un cementerio municipal de San Pedro de la Paz, que le permita a la creciente comunidad San Pedrina, contar con un sitio propio en el cual descansen los restos de sus familiares y deudos, ya que el actual está llegando a su límite de capacidad, aun cuando cuenta con algunos sitios disponibles. Y que la municipalidad pueda contar con los ingresos que dicho campo santo pueda producir para bien de los vecinos, como a su vez ir pensando ya en un crematorio, forma moderna de reducir los restos mortuorios, cumpliendo así con un sagrado servicio a la comuna.
"El cementerio de San Pedro, nace producto de un accidente ocurrido en 1899
Alejandro Mihovilovich, Investigador Histórico
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