Al menos tres violentistas participaron en el baleo a los trabajadores forestales
Autoridades, policías y militares evaluaron el estado de excepción, en un día que dejó cuatro detenidos y un camión quemado en Macrozona Sur.
Diego Gotelli C.
La investigación por la emboscada que sufrieron trabajadores en Lumaco comienza a dar luces de cómo sucedió el ataque ocurrido el martes, en el que murió el tiruano Segundo Catril, de 66 años.
Según informó el fiscal regional de La Araucanía, Roberto Garrido, serían al menos tres las personas que habrían atacado al mini bus que trasladaba a una treintena de funcionarios desde Tirúa hacia sus faenas de reforestación, vehículo que fue baleado con disparos que habrían sido percutados directamente contra sus ventanas.
"Consideramos que ese es un número mínimo de las personas que pudieron haber participado", señaló el persecutor en radio Universo, donde precisó que están a la espera de unos informes periciales que permitirían cifrar de manera exacta la cantidad de tiradores y de balazos que fueron percutados.
Sobre posibles motivaciones tras el atentado, el fiscal que vive hace dos décadas en la región dijo que "hace mucho tiempo" estos ataques "ya no responden a ninguna lógica", pues varias veces afectan de manera "indiscriminada" a personas ajenas al conflicto latente en la Macrozona Sur.
Santos Reinao, contratista del trabajador asesinado en la balacera, pidió "prontitud" en la indagatoria para hallar a los responsables del ataque, que catalogó como una "masacre".
"No es fácil enfrentar este tipo de situaciones porque el ataque fue muy grave, de extrema gravedad. Fue sin medir ninguna consecuencia", dijo a T13 el empleador.
El nombre de Reinao no es desconocido en la zona. Él es militante PPD y ha liderado diálogos con forestales para abordar demandas territoriales. Según radio Cooperativa, las faenas de reforestación a la que iban los trabajadores el martes era parte de dichos acuerdos, por lo que se indaga un posible ataque dirigido hacia su personal por parte de grupos más radicalizados.
Evaluaciones
El ataque agudizó los emplazamientos en la oposición para exigirle al Gobierno ampliar la cobertura del estado de excepción vigente en cuatro provincias de la Macrozona Sur, que hoy se centra en vigilar las rutas.
"Este estado de excepción moderado la señal que da es que no se va a combatir el terrorismo con toda la fuerza", criticó el diputado UDI Jorge Alessandri.
Ayer en La Moneda el Ejecutivo se reunió con autoridades locales, policías y Fuerzas Armadas para evaluar la primera semana de despliegue militar en la zona.
Tras la cita no se anunció cambios al plan actual, aunque la ministra del Interior, Izkia Siches, afirmó que del diálogo emanaron "recomendaciones" que le entregaron al Presidente Gabriel Boric.
Por la tarde el jefe de la defensa en La Araucanía, general Edward Slater, aseguró que desde el despliegue militar ha bajado la ocurrencia de hechos violentos en la región, y señaló que la vigilancia no está solo focalizada en vías principales como la Ruta 5.
Además le dijo a los violentistas que exigen sacar al Ejército del lugar que "a los militares no nos van a asustar".
Ayer un mensaje instando a que dejen la Macrozona fue hallado junto a un camión incendiado de madrugada en una ruta que une Lautaro y Vilcún. El vehículo mantenía encargo por robo.
último hecho
En otro hecho delictivo de la jornada, Carabineros detuvo a cuatro personas que fueron sorprendidas robando madera desde un fundo de Forestal Mininco en Collipulli (Región de La Araucanía). Los sujetos fueron grabados con drones cuando cargaban la madera de pino industrial en tres camiones, mientras un miembro vigilaba desde un jeep que no llegara la policía.
Se incautaron los cuatro vehículos usados en el robo y la madera fue devuelta a sus propietarios.