Cristian Aguayo Venegas
Hasta tres cuartos de hora tienen que esperar las familias de los cerros de Talcahuano y Penco para subirse a una micro que los lleve a sus trabajos o escuelas. El drama empeora en esta época del año en que el frío se siente con más dureza en los paraderos.
Natalia Miranda, presidenta de la Junta de Vecinos de Mavidahue de Penco, señaló que "el tema de la locomoción colectiva en nuestro sector es horrible. Muy lento. En las mañana cuesta mucho que los niños puedan llegar a sus colegios porque no pasan. A veces hay que esperar media hora, de repente 45 minutos. Todo el mundo se queja de lo mismo".
Fernando Bravo, representante de la Villa Belén, en la comuna de Penco, comentó que "los vecinos se quejan por este tema. Se han enviado cartas a la Seremi de Transportes buscando soluciones, pero hasta el momento no hay caso".
Patricia, una de las vecinas de ese barrio, afirmó que "las micros se demoran un montón. No hay una frecuencia establecida. Tenemos que bajar del lugar donde vivimos a la calle central donde pasan un poco más seguido. Lo malo es que pasan repletas".
"Por ejemplo, uno toma el bus saliendo de Penco, y éste va lleno, y no para hasta llegar a Concepción. Para la gente que vive camino a la comuna, en la Ruta 150, le es casi imposible tomar bus, ya que todos vienen llenos", complementó.
Talcahuano
Una situación parecida ocurre en los cerros choreros.
José López, presidente de la Agrupación Península de Tumbes, dijo que "estamos teniendo problemas, sobre todo en las mañanas y tardes. Después de las 20 horas, es imposible encontrar locomoción para subir a los cerros, y estamos hablando de todas las líneas", enfatizó.
Detalló que "sabemos que hay líneas que tienen muchas máquinas, como la Ruta del Mar, pero sólo cubren un sector de los cerros. La Vía Láctea dividió tanto su recorrido que no abastecen al cien por ciento".
José indicó que hay buses que se saltan recorridos "en la noche sobre todo". Por lo mismo, comentó que "exigimos a las autoridades, antes del cambio de Gobierno, que había un descontento con el tema de la frecuencia".
"Pedimos hasta la hoja de las frecuencias, quedaron de mandarnos la información pero nunca llegó nada", afirmó.
José comentó que "los sectores intermedios han sido los más afectados, desde la nueva Los Lobos, donde las micros van llenas. El sector San Francisco, La Gloria no tienen capacidad de tomar a esas gente, la mayoría queda botada".
"Si se ponen a fiscalizar abajo, claro, las micros van a pasar, pero arriba, la frecuencia que pasan no es la adecuada, pasan 30 minutos, y en la hora peak, debería pasar más buses", finalizó.
Cabe mencionar, que este fin de semana se conoció que la Seremi de Transportes de la Región del Biobío descontó cerca de 300 millones de pesos al área por incumplimiento de frecuencia. Claudia García, seremi de la cartera afirmó que "con la nueva regulación, que esperamos esté operativa en el segundo semestre, vamos a tener un mayor control de las horas, a través del GPS".
"Vamos a controlar y verificar cuales son las empresas que cumplen y las que no podremos caducarlas", finalizó.
"Si fiscalizan abajo, claro, las micros van a pasar, pero arriba, la frecuencia no es la adecuada ".
José López,, vecino de Talcahuano