Hualquinos se la juegan para salvar laguna Rayencura
Los vecinos buscan que el hermoso cuerpo de agua vuelva a ser una de las principales atracciones turísticas de la comuna.
Una hermosa pero trágica leyenda mapuche, habla sobre los orígenes de la Laguna Rayencura. Los Catirayes y los Tralcamahuidas vivían separados por el Biobío y solían tener disputas. Sin embargo, el destino quiso que, el hijo del cacique de los tralcamahuidas, Rayencura, y la hija del cacique Catirai, Rayenantu, se enamoraran y deciden escapar juntos para vivir su amor.
Nada de eso pasó. Las tribus pelearon durante su escape y en medio del combate, ambos murieron en las aguas del Biobío. Después fueron sepultados en sus tierras, y de sus tumbas nacieron vertientes que se transformaron en las lagunas que ahora llevan sus nombres.
En Talcamávida está la Rayencura. Para los habitantes de esta localidad de de Hualqui, fue un ícono por décadas. Familias enteras solían reunirse en sus orillas para bañarse, compartir con amigos y disfrutar la naturaleza.
Después de los 2000, esta tradición se perdió, hasta el punto que sus aguas ya no son aptas para el baño, se llenara de algas e incluso fuese utilizada algunos meses para botar aguas servidas.
Pero queda esperanza, y ahora un grupo de habitantes de la zona, aprendiendo del pasado y honrando el destino de la pareja, va por su rescate para nunca más volver a desencontrarse.
Pasado Glorioso
Yanette Escobar Flores, nacida y criada en la zona, forma parte del Comité de Recuperación de a Laguna Rayencura. Relata que desde el año pasado están constituidos y realizan actividades en beneficio del lugar.
"Estamos difundiendo y en marzo buscaremos apoyo de la comuna. Este es un lugar de todos y debemos participar en su recuperación, ya que traería más visitas a la zona y ayudaría a la economía local", explica.
Sobre sus 'años dorados', recuerda que "era un gran balneario y la gente podía acampar. Antes no habían tantos recursos para salir de vacaciones, así que familias enteras venían a bañarse, a almorzar, disfrutar de la naturaleza, andar en bote y relajarse".
"En los 90', nuestras tardes eran en la laguna. Se repletaba. En Talcamávida había carnavales, entonces después todos pasaban al sector. Familias tomaban once, todos eran amigos y era distinto, se respiraba comunidad", agrega.
Yanette cuenta que actualmente son 43 personas en el Comité. Se han reunido con autoridades municipales y en diciembre vivieron una jornada de villancicos en piano.
Además, el próximo sábado 5 de febrero realizarán una nueva jornada musical junto al pianista Eugenio Urrutia para celebrar el Día Mundial del Humedal.
Para llegar, Yanette explica que "en auto hay que tomar la carretera en dirección a Hualqui y seguir el camino de asfalto hacia Laja. Está todo señalizado, es imposible perderse. Si viajas en tren, cuando vas llegando al pueblo se ve la laguna, por lo que está al alcance de todos".
En el sector hay flora y fauna, tales como taguas pequeñas y grandes y carpas. También han recibido la visita de cisnes de cuello negro y de familias de coipos.
En dicho sentido, explica que "hoy en día el alga sigue presente y cubre cerca del 30% de la superficie de la laguna. Es la problemática más grande que encontramos. Estas algas se ven superficiales, pero tienen una raíz grande hacia el fondo. Como comité gestionaremos que se realicen acciones de monitoreo y limpieza de la zona, respetando toda la biodiversidad".
Proyectos
Adrián Hernández Herrera es presidente del comité y recuerda que "cuando pequeños aprendíamos a nadar, nos bañábamos, hay una historia muy cercana con la laguna. Pudimos aprovechar este cuerpo de agua, pero después de eso, las generaciones venideras no tuvieron esa oportunidad".
"Del 2000 en adelante, empezó a ir menos gente y comenzó a crecer alga. Lamentablemente nosotros mismos como habitantes nos fuimos despreocupando y ya no se pudo seguir bañando la gente, de cierta forma nos fuimos desconectando", agrega.
Por lo mismo es que "nuestro principal propósito es acercar a la comunidad y que el sector vuelva a ser como antes. Tuvimos una actividad en diciembre que fue un concierto de villancicos en piano, con la presencia de niños y adultos, de alguna forma también se puede ir incentivando la cultura y las artes en el sector".
En relación a sus acciones, explica que "el proyecto que tenemos de recuperación de las aguas, de limpieza y hermoseamiento, tomará un buen tiempo, no es de la noche a la mañana que se puede cambiar, estimamos un proceso de 5 a 7 años".
"Este año queremos acercarnos a entidades públicas y privadas para ir introduciendo nuestro proyecto. Nos hemos propuesto hacer enlaces, tener reuniones y una mesa de trabajo. Hablamos con la municipalidad, seremis y comunidad, para que sean las mismas personas del pueblo que decidan lo mejor para nuestra laguna", remarca.
El presidente del comité, también dejó la puerta abierta para todos los que quieran sumarse al proyecto: "Cualquier persona de la comuna puede ser socio y acercarse. El día de la actividad (próximo sábado), tendremos el libro abierto para los que se quieran inscribir. También estamos llamando por nuestras Redes Sociales a reuniones abiertas con la comunidad".
Bastián Labbé, convencional constituyente del Biobío, ha formada parte de reuniones con el comité para guiarlos.
"Conversamos con la comunidad y entendemos que tiene que ser un espacio que pueda tener su resguardo ecológico que corresponda con los niveles de respeto a la biodiversidad que existe en el lugar, pero también para que las personas puedan disfrutar de esos espacios", dice.