Día del Gato
"Los perros nos ven como dioses y los caballos como a sus iguales, pero los gatos nos miran como si fuéramos sus súbditos", así es como Wiston Churchill definía a quienes celebran una de sus tres efemérides en Chile: el 20 de febrero, el 8 de agosto y el 19 de octubre; los gatos. Son enigmáticos; pero también son cariñosos y una de las mascotas más queridas. Se calcula que existen 500 millones de gatos domésticos en el mundo (incluidos los de calle), siendo EEUU con 73 millones el que posee la mayor población mundial, seguido de China con 53 millones y en 3er lugar Alemania con más de 14 millones, siendo el país de la comunidad europea con más de estos animales, reconociéndose según "The international cat association", 71 razas de ellos.
¿Por qué elegir un gato como mascota? Sin duda que es una respuesta muy difícil para algunos, mientras que para otros paradójicamente es relativamente fácil: es un animal independiente, limpio, no ocupa mucho espacio, suele no generar mayores destrozos en casa (solo algunos rasguños en sillones, muebles y paredes), le gustan las caricias lo que genera un vínculo muy cercano con sus propietarios, aunque siempre se ha dicho que son ellos quienes tienen como propiedad a un humano de su elección (una o un Karen), dócil como característica fundamental de selección genética, aunque existen excepciones y muchos otros atributos que cada propietario puede apreciar de sus "michis".
Pero ¿son los gatos y el hecho de vivir dentro de una casa y convivir tan estrechamente con sus tutores, realmente seguros para la salud humana? La respuesta es "Sí" y la verdad que en la actualidad hay más beneficios que perjuicios en convivir con ellos, algunos de estos beneficios son la activación del sistema inmune de sus propietarios disminuyendo las reacciones alérgicas y las infecciones, disminución del estrés, su ronroneo es beneficioso para mejorar las condiciones de sueño y para la recuperación de pacientes que han sido operados o que presentan condiciones de hipertensión, los niños se hacen más responsables en relación a dar cuidados a un ser vivo y a los abuelos les brinda una ocupación, entre otros. Solo debemos mantener un estricto apego a las medidas sanitarias mínimas de control de enfermedades infecciosas y parasitarias (tanto internos como externos), por lo que una vacunación y desparasitación periódica y, por supuesto, una adecuada alimentación e higienización de los espacios, así como manejos reproductivos (castración o esterilización para evitar la sobrepoblación y el abandono) nos asegurará que nuestro gato es inocuo para nosotros, prolongaremos su vida y cumpliremos de manera correcta con la tenencia responsable de nuestra mascota.
Columna
Luis Riquelme Olivares, Médico Veterinario, docente Universidad Andrés Bello