Familiares y carabineros despiden a sargento muerto en emboscada
Funeral del sargento oriundo de Concepción se realizó en Quillón ante autoridades y cercanos.
Mirko Roca
En una emotiva ceremonia fue despedido ayer en Quillón el sargento primero Francisco Benavides García, muerto en una emboscada por parte de un grupo indeterminado de sujetos armados en Collipulli, Región de la Araucanía. Desde la Fiscalía señalaron que hubo intención directa de dar muerte a los policías. El carabinero, de 42 años y oriundo de Concepción, dejó dos hijos y su esposa.
Durante el servicio fúnebre, el director general de Carabineros Ricardo Yáñez dedicó unas sentidas palabras al mártir 1.222 de la institución y criticó la poca seguridad para sus pares. "La muerte de un carabinero no puede dar lo mismo. Esta ceremonia y comunidad que se convocó a recibirlo y despedirlo da cuenta que los carabineros somos personas y seremos humanos que sufrimos y que sentimos y que estamos más presente que nunca en el acontecer de nuestro país", sostuvo.
Sobre la emboscada en la localidad de San Andrés en Collipulli, sostuvo que "este ataque artero que terminó con la vida de un camarada es una cobardía de terroristas y criminales, que no se puede aceptar. Tiene que haber una condena transversal, pero que sea pública, enérgica, porque el que no lo hace, es cómplice de lo que está ocurriendo".
La misa tuvo inicio a las 11.00 terminó con la sepultura del sargento en el cementerio de Cerro Negro, ante la compañía de familiares, carabineros y autoridades. "Falta proteger a nuestros carabineros, porque hay mucha gente que teme salir a la calle. Hay que parar esto", señalaron vecinos que se agruparon en las afueras de la Parroquia de Quillón.
En medio de la ceremonia, el padre del sargento sufrió una descompensación, debiendo ser retirado en ambulancia del lugar.
Respaldo jurídico
Además, el general Ricardo Yáñez aprovechó para reclamar un mayor respaldo jurídico en el uso de las armas en los respectivos procedimientos policiales. "Necesitamos normas que permitan que un carabinero, después de usar sus armas, no pase a un control de detención, que sea imputado por delito de homicidio. Es al revés. Y eso es que lo tenemos que regular, para que el carabinero pueda actuar con más condiciones de seguridad", argumentó.
Al funeral acudió también el Presidente Sebastián Piñera, quien sólo habría podido estar 10 minutos en la ceremonia. Según radio Biobío, el mandatario habría sido increpado por familiares de Benavides, que le habrían solicitaron el retiro del lugar. Posteriormente, Piñera y la primera dama Cecilia Morel, invitados por Carabineros, habrían salido por un costado de la iglesia hacia la casa parroquial, para abandonar la ceremonia religiosa.