Una vacunación sin precedentes en la historia
En los momentos en que entramos en una nueva fase en la ardua tarea de contener la pandemia por coronavirus, cuando comienza una vacunación inédita en la historia mundial dado los alcances y magnitud de ella, se suscitan algunas preguntas y a veces cuestionamientos.
El primero podría ser el de la efectividad y seguridad de las vacunas en general, punto que pareciera no tener discusión, ya que desde que se descubrió la vacuna contra la viruela a fines del siglo XVIII, esta tecnología ha logrado salvar a cientos de millones de vidas, por enfermedades que diezmaban a la población. Su seguridad tampoco debería ponerse en duda, sobre todo las desarrolladas en los últimos 50 años, las que han sido testeadas y controladas científicamente. Además, tenemos instancias regulatorias en salud pública que velan por el correcto uso de ellas. En la actual pandemia se han desarrollado y ya se encuentran bajo aplicación varias vacunas contra SARS COV-2, cuyas características son inducir una respuesta de anticuerpos contra coronavirus y probablemente también activan otras formas de reacción de nuestro complejo sistema inmunológico.
En especial en nuestro país, en momentos en que ya se han vacunado miles de personas, empezando por los grupos más expuestos como los agentes de la salud y adultos mayores, debemos tener confianza en que contamos con un sistema de salud pública y privada con larga tradición en vacunación. Cabe destacar la gran red de atención primaria, basada especialmente en los municipios, que está demostrando en la ejecución de esta medida de prevención una gran capacidad y despliegue a pesar de los inconvenientes inherentes a una campaña sin precedentes.
Sólo queda que todos nos dispongamos a vacunarnos en forma voluntaria y decidida, para obtener la ansiada protección personal frente al virus, con lo que contribuimos también a la protección de quienes nos rodean.
Dr. Fernando Chuecas Saldías, Vicedecano de la Facultad de Medicina y Ciencia Universidad San Sebastián