Diego Gotelli C.
Un día que ansiaba desde hace meses terminó en una tragedia para Bayron Díaz, joven de 18 años que el lunes falleció tras sufrir un accidente dentro de su colegio, en el que era la primera jornada de clases presenciales tras el cierre del recinto producto de la pandemia.
"Mi hijo fue feliz al colegio a su primer día y ellos me lo entregaron muerto", lamentó en CHV Karen Barraza, madre del mejor, quien cursaba cuarto medio en el Colegio Industrial Las Nieves de Puente Alto.
Según los primeros antecedentes, el incidente ocurrió pasada las 11 de la mañana, cuando el estudiante junto a un compañero participaban de un taller de electricidad, ramo en el que se especializaba su enseñanza técnico profesional.
En medio de la clase, y acompañado de un profesor, Bayron se habría electrocutado mientras manipulaba un motor, quedando gravemente herido. Tras recibir los primeros auxilios, el menor fue trasladado en ambulancia al Hospital Sótero del Río donde finalmente falleció por las graves lesiones que le causó la descarga eléctrica.
La familia y amigos del estudiante realizaron una velatón ayer en el frontis del colegio en su memoria. En el lugar acusaron una presunta negligencia del establecimiento en las medidas de seguridad y criticaron una falta de información desde la gerencia hacia los familiares. "La culpa (de la muerte) la tiene el colegio", señaló la abuela de la víctima.
La Fiscalía confirmó ayer que abrió una investigación para esclarecer los hechos e instruyó los primeros peritajes a la PDI, mientras esperan un informe del Servicio Médico Legal.
A través de un comunicado la dirección del colegio, dependiente de la fundación Protectora de la Infancia, lamentó el fallecimiento del estudiante y aseguró que han tomado contacto con todos los organismos correspondientes "para prestar colaboración y cumplir con los requerimientos de orden judicial necesarios con el fin de esclarecer este hechos a la brevedad".
En paralelo a la investigación judicial, la Superintendencia de Educación ingresó una denuncia de oficio para solicitar antecedentes al establecimiento, reglamento interno y protocolos de actuación, para investigar si el colegio actuó de acuerdo a la normativa educacional.
El fiscalizador explicó que todos los colegios deben contar con dicho protocolo, además de un plan integral de seguridad escolar, los que deben señalar "de forma clara y organizada" las acciones que se adoptarán frente a una emergencia. En el documento se debe explicitar, por ejemplo, los responsables de aplicar los planes de emergencia, los recintos asistenciales cercanos, y quienes deben comunicar a los apoderados del accidente. Sobre lo último, los padres del menor acusaron una tardanza en la notificación.
"Este es un accidente lamentable que debe ser profundamente investigado. Esto está en investigación y una vez que se esclarezcan los hechos se va a dar cuenta de cuáles fueron las raíces por las cuales se produjo el problema", acotó el subsecretario de Educación, Jorge Poblete.
La autoridad añadió que si bien el accidente ocurrió dentro de un colegio, éste no puede ser atribuido al plan de retorno a las clases presenciales que impulsa el Ministerio de Educación. "No tiene nada que ver con la situación covid ni con los protocolos sanitarios", enfatizó.
"Ellos fueron negligentes. Mi hijo fue feliz al colegio a su primer día y ellos me lo entregaron muerto.
Karen Barraza, Madre del la víctima