Ollas comunes requieren de ayuda para poder continuar
Una de las principales dificultades ha sido la de conseguir financiamiento o apoyo para la cruzada.
Las ollas comunes y comedores sociales se han multiplicado por la región del Biobío desde el inicio de la pandemia, siendo una fuente importante de ayuda en los sectores más vulnerables de la zona.
No obstante la ayuda que entregan desde las juntas de vecinos, agrupaciones sociales, ONGs o particulares, se les han presentado una serie de trabas que complican su gestión, siendo el financiamiento el principal obstáculo.
En la coordinadora territorial de Gaete, que apoya distintas ollas comunes y comedores sociales de Talcahuano, explican que han tenido una lucha con los permisos, y "ahora que pasamos a fase dos y trabajamos los fines de semana tendremos que gestionar nuevamente los permisos", dijo Angela Mella.
Agregó que la mayoría de las ollas comunes subsiste a través de donaciones de vecinos, amigos y "el gobierno local tiene que hacer un trabajo de tratar de calzar las ollas comunes, y la ayuda que llega, por ejemplo de empresas, no está destinada a organizaciones sociales, sino que a personas naturales".
En ese mismo sentido, Gonzalo Osorio de la ONG Levántate con sede en Coronel, dijo que tienen una iniciativa de entregar almuerzos a familias que están pasando por un momento complicado. "Son 360 almuerzos todos los domingos con la posibilidad de ampliarnos en las próximas semanas", encontrando dificultades para poder ampliar y financiar con todas las medidas de seguridad que se requieren en la escases de recursos.
"Como institución estamos destinando 1 millón y medio mensualmente en este ítem y eso ha significado ampliar la cantidad de socios permanentes que necesitamos para financiar esta campaña", explicó.
Preocupación
René Betanzo, presidente de la agrupación San Pedro de la Dignidad, dice que "la solidaridad es momentánea y se esfuma", y que esto puede traer un complejo panorama para quienes se alimentan en ollas comunes.
"Lo preocupante hoy en día es que hay gente que está dependiendo alimentariamente de las ollas comunes, gente que está en situación de abandono, y otros, y la dificultad para las ollas, asociado a esa dependencia, es que no están teniendo el abastecimiento suficiente", concluyó el dirigente social.
"Lo preocupante hoy en día es que hay gente que está dependiendo alimentariamente de las ollas comunes.
René Betanzo
"La ayuda que llega, por ejemplo de empresas, no está destinada a organizaciones sociales, sino que a personas.
Ángea Mella
360 almuerzos entrega cada domingo la ONG Levántate con sede en Coronel.