Diego Gotelli C.
Con el pequeño comercio abierto y más vehículos circulando amanecieron ayer Ñuñoa, La Reina, Vitacura, Lo Barnechea, Colina y Tiltil, las primeras comunas de la capital que dejaron atrás la cuarentena para avanzar a la primera fase de desconfinamiento en la región más golpeada por el covid-19.
El inicio de la fase 2 del plan Paso a Paso fue notorio. Al permitir el libre desplazamiento entre lunes y viernes, varios santiaguinos que estuvieron meses encerrados volvieron a la calle. Como muestra de ello, en la red de Metro se constató un 9,6% más de viajes que el mismo día de la semana pasada, alza que en las micros llegó al 14%.
El Ministerio de Transportes informó que durante la hora peak de la mañana en el Gran Santiago hubo un aumento del 8% de los vehículos en circulación, si se compara el flujo vehicular de las principales avenidas ayer con las de hace una semana. El aumento, según la cartera, se concentró casi exclusivamente en zonas desconfinadas. "Las personas han respetado las zonas de cuarentena. Esperamos que esta gradualidad pueda mantenerse", dijo la ministra Gloria Hutt.
Según la medición de la cartera, la comuna donde más aumentó la movilidad fue Lo Barnechea, que tuvo un 33% más de vehículos en la calle. En el municipio aumentaron la estimación, pues sus portales lectores de patentes constataron un alza vehicular del 56%.
A la nieve
La alcaldía contabilizó además que 350 vehículos ingresaron al puesto de control de la ruta a Farellones en dirección a las zonas de nieve. "No se puede no dejar subir. Está normado por el Gobierno que en la etapa 2 de Transición se puede transitar por la comuna, y Farellones es parte de nuestra comuna", explicó el alcalde Cristóbal Lira.
La autoridad apuntó a que en la cifra pueden haber vecinos que fueron a revisar sus casas tras semanas sin verlas, aunque recordó que no pueden quedarse en la segunda vivienda, por lo que deben volver antes del toque de queda.
Sebastián Ugarte, jefe de la UCI de Clínica Indisa que ayer participó del balance del Minsal, coincidió en que la medida es "un poco apresurada", postura que se repite entre expertos.
El ministro de Salud, Enrique Paris, dijo estar consciente de que "pueden haber rebrotes", pero defendió la decisión y recordó que si los índices empeoran "volveremos atrás".