Juan Pablo Fariña
Entre la espada y la pared dicen estar varios dueños de locales de comida, quienes, debido a las medidas de prevención del Covid-19 bajaron sus cortinas de forma indefinida, esperando que la pandemia pueda ser controlada.
Hans Lozano, dueño de Rendibú, empresa penquista especialista en cafés, batidos y smoothies dijo que tuvieron que cerrar sus tres locales. "Esto ha sido muy complejo, porque no sabemos si vamos a poder salir bien parados. Financieramente uno funciona como pyme pese a tener varias sucursales, ya que no tenemos un patrimonio mas allá de la marca y las máquinas", dijo.
"Teníamos reservas para el Estallido Social y en todo momento hubo sucursales abiertas generando ingresos y aguantando, pero con el virus no se descarta un cierre considerando la incertidumbre. Esperamos poder aguantar el chaparrón unos tres meses sin funcionar", manifestó.
Consultado por la situación de los trabajadores, explicó que "tuvimos que tomar la alternativa para ellos de un permiso sin goce de sueldo para abril, mayo y junio. De otra forma sería imposible mantener la planilla, porque hay otros gastos fijos como arriendos. Otros están cerrando, porque venían con pérdidas, pero nuestra intención es seguir adelante".
Incertidumbre
Emilio Estrada, más conocido como "Pepo" y dueño de la Fuente Penquista, opinó: "Siempre hemos dado la pelea con la Fuente, pero con el Estallido Social perdimos algunas propuestas que nos hubiera servido para hacer crecer el negocio y ahora salió esto de la pandemia".
Agregó que "es muy complicado, porque estoy en un segmento de emprendedores que fuimos aprendiendo a porrazos. En el camino uno se formaliza, pero esos errores todavía te pesan en materia económica, porque arrastras deudas".
De las medidas que pretender tomar para resistir, sostuvo que "hay que buscar alternativas para ver el tema del pago del arriendo o el compromiso con proveedores. Uno no tiene la espalda como para cancelar todo sin seguir generando lucas. Muchos están optando por unir proyectos , pero la situación esta complicada. Estamos manteniendo activas las redes sociales y por mientras estoy cocinando en tiempo real en mi casa para los usuarios.
3 meses, como máximo, es lo que aseguran algunos comerciantes que pueden aguantar.
63 de avenida Bernardo O'Higgins se encuentra el local la "Fuente Penquista".
14 profesionales de la salud trabajan en el control sanitario colocado por el municipio.