Colo Colo sigue en caída libre tras perder ante el Jorge Wilstermann
Hasta el minuto 58 duró el ejercicio de resistencia que hizo ayer Colo Colo en el Estadio Félix Capriles de Cochabamba, Bolivia, ante el Jorge Wilstermann, en el debut en la Copa Libertadores, tras caer 0-2. En la previa Gualberto Jara había destacado el plan de juego: habló de jugar "con las líneas juntas", y que los jugadores debían dosificar sus esfuerzos físicos. Buscaba un equipo que no arriesgara en demasía, ni que tampoco se quedara sin físico por una intensa presión. Sin embargo, la idea no duró todo el encuentro.
Y fue por un error de cálculo de Brayan Cortés. Un disparo de fuera del área se desvió en César Fuentes y el portero salió a destiempo a puñetear, siendo anticipado con un cabezazo de Ricardo Pedriel. Hasta ahí el partido estaba controlado porque el brasileño Serginho había sido la principal figura, pero con ninguna chance clara excepto un error de Óscar Opazo, quien casi anota un autogol complicando con un pase a Cortés.
Colo Colo apenas tuvo dos tiros en el primer tiempo explicados por unas pobres estadísticas: solo controló un 36,6% de la posesión y dio 134 pases ante 226 de su rival.
Con el tanto boliviano los locales cedieron terreno, pero el estado de la cancha y el cansancio de las piernas hizo que los contragolpes fallaran en el último toque. La más clara vino de un saque lateral con un derechazo desviado de Pablo Mouche. Y aunque ingresaron Javier Parraguez, Gabriel Costa y Williams Alarcón, el equipo terminó en la lona con el segundo gol de Ramiro Ballivian. En la altura Colo Colo sigue sin encontrar el impulso para levantar vuelo.