Angélica Vásquez V.
Lo vieron en las noticias ¿cierto? El ultra poderoso productor de Hollywood, que comenzó con un juicio hace dos años por acoso y abusos en contra de mujeres del espectáculo. Cuando lo vi en imágenes el año pasado así me pareció. Siempre me fijo en rostros, posturas y ojos de personas en problemas. En ese momento me pareció grande, molesto, furioso por haber dejado de ser vaca sagrada. Y luego lo dejé de ver hasta unos días atrás en que fue considerado culpable de delito sexual y violación en tercer grado. Y esto sí que me impresionó: cuando lo muestran caminando con sus abogados, él va ahí, entre todos los flashes, apenas caminando apoyándose en un burrito de esos que usan los ancianos. Con su espalda completamente curva. Y ahí quería llegar. El mapa de nuestro cuerpo. Nuestro hogar, nuestro templo, va mostrando nuestra vida. Es como un reflector. Y verlo agachado sujetándose como un anciano... Su espalda lo abandonó literalmente. Emocional y espiritualmente, diría yo. Significados simples y poderosos. Es ley que lo que cargamos no nos dejará en paz a menos que trabajemos de manera consciente con aquello, ya sea el secreto más fuerte o el complejo más tonto. Ya se ha dividido la espalda en tres partes para identificar lo que cargamos. La parte de arriba es no contar con apoyo; la del medio es culpa y atascamiento, la inferior inseguridad de respaldo económico. Louise Hay lo detalla en sus libros. Da nervios cuando empezamos a ver el porqué de ese dolor. Finalmente la espalda duele y pesa. Nuestra columna nos sostiene, nos conecta con fibras invisibles para mantenernos derechos, compuestos, íntegros. ¿Han visto a las abuelitas de antes? Todo lo que debieron cargar y callar. Yo misma fui donde un arreglador de huesos. Tenía que resolver eso con un tirón de los que duelen, pero paralelo estaba trabajándolo de manera interna. Cada parte de nuestra máquina maravillosa nos muestra lo que sucede. Ahora me enfoqué en la espalda por el poder que tiene. Es que ¿Se imaginan recibiendo todo del Cosmos y Divinidad sin estar erguidos, sin estar de pie? Mal ahí.