Foreros brindaron por su último gran ídolo
Fanáticos UdeC se organizaron y armaron despedida al "Tigre" Muñoz con una cena en su honor.
Festejaron sus atajadas y celebraron triunfos memorables. Uno, Cristian Muñoz, bajo los tres palos, y los otros, los foreros, desde la galería.
Recordadas victorias como aquella sobre Palestino 3-2 para levantar el título de la Copa Chile 2015; o aquella tarde inolvidable de Curicó, en el 1-1 frente al local para firmar el regreso a Primera A el 2013.
Entonces "¿cómo lo vamos a dejar irse así nomás?". Es lo que sintió un grupo de hinchas de la Universidad de Concepción, una vez que su último ídolo, el querido "Tigre", anunciara en diciembre el cuelgue de los guantes a sus 42 años.
Y por lo mismo, los fanáticos se organizaron, y le regalaron su propia despedida a quien fuera su portero por los últimos 6 años. No en una cancha ni desde la galucha, sino que en torno a una mesa y su buen "ágape" en la Posada Tranque Viejo de Quillón, restaurante de propiedad de un fanático del Campanil, Víctor Rabanal.
"Cuando Víctor se enteró de esta idea, propuso hacerlo en su restaurante. La verdad es que cuando Cristian anunció su retiro, varios pensamos en que había que hacer algo, merecía su despedida de parte nuestra, de los hinchas", contó Carlos Moncada, seguidor acérrimo de la UdeC y que de una se sumó a la despedida del "Tigre", idea que nació en Facebook entre los hinchas y que agarró forma de una.
"Se armó un grupo de whatsApp y sacamos adelante la idea. Esperamos a que Cristian regresara de Argentina y se le hizo la invitación, por supuesto la aceptó muy agradecido", agregó el fiel al Campanil.
Teñido de oro y cielo
Fue un momento único para el arquero. "Fue algo muy lindo, un reconocimiento a todos estos años en el club, al cariño que la hinchada me ha tomado, por la entrega, el rendimiento, por como representé estos colores cada vez que me tocó jugar. Es algo que no me esperaba, y para el jugador es el regalo mas importante, el reconocimiento del hincha. Quedo grabado en su memoria como un referente para ellos, que en definitiva son quienes hacen al club en cada partido, y queda grabado en mi corazón", comentó el Tigre emocionado, en medio del decorado local, donde todo se tiño más oro y cielo que nunca.
El ex meta destacó que dicho gesto refleja la esencia de los seguidores de la UdeC. "Es una hinchada muy fiel, apasionada, que quiere mucho a sus colore, que siempre está presente, siempre que me tocó jugar había un representante en la galería. A uno como jugador siempre ver un hincha lo pone orgulloso. Una hinchada que tiene los valores muy claros, respetuosa, que va de la mano de los valores que pregona la UdeC. Un hinchada que me deja marcado. Feliz de haber podido terminar mi carrera en este club tan lindo", expresó el ex portero.
"Cuando nos enteramos de que el Tigre dejaba de ser jugador, había que intentar hacer una despedida. Fue penoso para los hinchas que dejara de jugar, porque sabemos que es un tremendo referente del fútbol chileno, y que lo haya terminado acá es importante para nosotros. No olvidemos que él estuvo en Boca Juniors, Colo Colo, Huachipato, pero que lo haya hecho acá es un gran logro y un honor", comentó Víctor Rabanal, feliz de tener en su local al invitado estelar.
"Adornamos el local con banderas, fotos. Hubo momentos emotivos, improvisamos un arco y mi hijo pequeño le lanzó el último penal a Muñoz. Y también hubo un momento en que un hincha de Colo Colo que estaba en el local, quiso tomar la palabra para agradecer al Tigre su paso por el Cacique, destacando también que los hinchas de la UdeC puedan darse este gustito de compartir con sus ídolos de una forma tan íntima", repasó el dueño del restaurante, hasta donde llegó el Tigre junto a su esposa y sus tres hijos.
"Lo vamos a extrañar, no sólo por lo entregaba en cancha, sino porque él representa esa conexión con el hincha de la UdeC, una persona humilde, respetuosa, y que se ganó el corazón de la hinchada", puntualizó Rabanal.
A la comilona llegaron más de 60 fanáticos, y asistieron también algunos ex compañeros del meta, como el volante Alejandro Camargo y Francisco Portillo, quienes quisieron ser parte de la particular y emotiva despedida.
2013 el año en que Cristian Muñoz llegó para custodiar el arco del cuadro del Campanil.