Carlos Paz Durán
No hay otro como él, y lo mejor es que tuvo un destacado paso por la zona. Si bien Esteban Paredes es dueño del récord de máximo artillero del fútbol nacional, Osvaldo Castro, el recordado "Pata Bendita", tiene a su haber la marca como el chileno más goleador de la historia con 373 dianas, incluidas los que aportó a la selección chilena, la que integró en el Mundial de 1974.
Sesenta y uno de esos tantos, Castro los celebró en Deportes Concepción, donde jugó entre 1969 y 1971. "De ellos, 36 los marcó en la campaña de 1970, en la que se consagró como máximo artillero de Primera División", señaló Jorge Paredes, comentarista radial que en 1991 organizó la última visita del "Pata" a la zona.
"Costará mucho que alguien supere sus 373 anotaciones, y qué anotaciones. A la pelota le pegaba como un fierro. Podía marcar desde 35 metros o más. Verlo ejecutar los tiros libres era un show", acotó Paredes.
Con 348 goles, Iván Zamorana es quien más cerca estuvo del récord del nacido en Copiapó hace 71 años. Más atrás aparecen Sergio Salgado, Marco Antonio Figueroa, Carlos Caszely y Paredes.
"Osvaldo era tan goleador, que una vez jugando por La Calera, y de visita contra La Serena, nos dijo: 'Ustedes dedíquense a defender y déjenme a mí solo arriba. Le hicimos caso, como siempre, y se matriculó con los goles con que triunfamos 2-0", recordó Germán Concha, quien era central en ese equipo, y que hoy está radicado en Arauco.
Concha también aclaró otra vieja discusión con respecto a Castro: de qué jugaba. "Aunque vestía la camiseta 10, y por eso muchos creían que era volante, en realidad siempre fue centrodelantero", aseguró.
Zurda fenomenal
En la tienda calerana, el zurdo militó entre 1965 y 1968, aportando 72 anotaciones. "Tenía una zurda fenomenal, y eso que calzaba número 36. La pierna derecha, eso sí, la usaba únicamente para afirmarse", destacó Eduardo Guzmán, hincha lila que no se perdía sus partidos "en el Estadio Regional".
"Una vez vino Temuco, y parece que su arquero, Francisco Fernández, no sabía mucho de la pegada del 'Pata', pues en un tiro penal que él ejecutó, se colocó de espaldas a la pelota. Cuando se dio vuelta para atajar, la pelota ya estaba en la red", rememoró Guzmán, quien acotó que el crack "no era un derroche de técnica. Hacía lo justo y necesario. Era con la pegada con lo que desequilibraba".
Luego de la tienda lila, el 10, partió a México, donde aumentó sus números al anotar 49 tantos en el América, 91 en Jalisco, 44 en Coyotes Neza, 24 en Atlético Potosino y nueve en Pumas de la Unam, donde puso fin a su trayectoria en 1984, y donde trabaja en el fútbol formativo.
"Aparte de la potencia de su patada, lo que más me llamó la atención de Castro fue su humildad. Como persona, él a nadie hacía daño", aseveró Concha.
61 goles marcó Castro en su paso por Deportes Concepción, donde jugó entre 1969 y 1971.