Deportistas protegen sus dentaduras con estilo
Juan Rivera desarrolla un trabajo junto a varios atletas que quieren cuidarse y también verse bien.
Juan Rivera, fundador de "Bucales Rivera" afirma: "Me han pedido diseños con sus nombres, esqueletos, mujeres semidesnudas, dibujos y hasta de Gokú".
"Debo admitir que los primeros que realicé resultaron horribles, pero a medida que avanzaba y mi experiencia, mi trabajo lo he pulido mucho más", sostiene entre sonrisas el emprendedor que ya cumple un año con este trabajo.
Chorero de nacimiento, este laborista dental comenzó su carrera hace 15 años. Estudió en la Universidad Santo Tomás donde logró titularse, luego comenzaron los desafíos de buscar un trabajo. "Fue complicado al principio, tuve que ser perseverante ya que el campo laboral no era muy bueno. Muchos se confunden y piensan que soy dentista y no es así. Nosotros somos los que fabricamos los aparatos protésicos e implantes. Tiempo después, tras pasar de laboratorio en laboratorio, llegué a mi actual trabajo en la clínica Innova donde ya llevo bastante tiempo".
La idea de los bucales personalizados nació un día en que Juan veía una película donde salían bucales diseñados. Al estar inmerso en el tema de las prótesis dentales, vio que podía surgir un nuevo trabajo. "Quiero recalcar y recordar que no solo los boxeadores y karatekas utilizan bucales, sino que también los rugbistas, jugadores de hockey, skate, en fin, todo deporte de alto riesgo".
Protección con estilo
Es así como deportistas ven esto como una oportunidad de protegerse físicamente sin perder el estilo. Gracias a la calidad del trabajo, "Bucales Rivera" patrocina a muchos clubes a nivel regional. "Fighters Ground de San Pedro de la Paz, a quienes agradezco mucho, especialmente al coach Claudio Jara, quien ha confiado y me ha ayudado mucho a difundir mi trabajo. También trabajo con Team Rivera, Jacqueline Ayala campeona mundial, entre varios más. Estoy muy feliz ya que, a pesar del poco tiempo, muchos deportistas han confiado y premiado mi trabajo", comentó.
A diferencia de un bucal tradicional, estos tipos de protección están a la medida de cada persona, lo que evita que se caiga o se mueva al recibir cualquier tipo de impacto.
"En resumen, la elaboración empieza por una impresión que se lo toma al paciente. Esto es más conocido como molde. De ahí sacamos el modelo en yeso y sobre eso trabajamos con tres capas de silicona gruesa, estas láminas se van estampando una a una para garantizar la protección", detalló.
Si bien Juan realiza trabajos particulares, es su microempresa la que se lleva toda la atención. Además, afirmó tener el apoyo del Dr. Arroyo, quien le cedió un lugar en la clínica. "Tuve que demostrar que esto era un trabajo serio. Para que el proyecto sea completo, también se necesita la evaluación de un dentista que sea reconocido y tenga la confiabilidad de los pacientes". Asimismo, confesó que él y su colega practican artes marciales desde hace años, lo que facilita aún más el trabajo. "Conocemos este mundo y sabemos que es lo que se necesita".
"No solo boxeadores y karatecas usan bucales, también rugbistas y jugadores de hockey".
Juan Rivera, laboratorista
Precios y lugares
Los precios varían entre los 35 y 40 mil pesos y sirven para grandes y pequeños. "Todo depende también del deporte que practique, el tamaño y diseño. Así que quienes se interesen y necesiten de protección dental, pueden encontrarme en la fanpage de Facebook y en Instagram".