Manuel Muñoz González
A Robinson Méndez le calza de cajón ese dicho de "tener dedos para el piano". Es que el deportista de 34 años ha sabido sacar provecho a su facilidad para adaptarse a distintos deportes, siendo primero el tenis, luego el canotaje y ahora el básquetbol, todos ellos a nivel paralímpico, en los que ha destacado durante su carrera deportiva.
El muchacho, quien producto de una bala loca quedó en silla de ruedas en su adolescencia, no dejó de lado el deporte, siendo el tenis el que más éxitos le ha reportado, pues llegó a competir en las paraolimpiadas de Atenas (2004), Pekin (2008), Londres (2012) y Rio de Janeiro (2016), además de ser campeón nacional en la disciplina del deporte blanco.
Luego se vino a vivir a Conce, donde incursionó en el paracanotaje hace un par de años, deporte donde en poco tiempo ha tenido logros tanto nacionales como sudamericano y panamericano; y ahora sumó la faceta de basquetbolista, con lo que acaba de ganar medalla de plata en los recientes Juegos Paranacionales en Santiago.
"El básquet fue mi primer deporte cuando quedé en silla de ruedas, pero por cuidarme un poco de las lesiones, me decidí por el tenis, otro deporte que me dio grandes satisfacciones. Hace seis o siete años que no lo practicaba, y este último tiempo decidí retomarlo, porque quería aportar a la región, donde se han portado muy bien conmigo desde que me radiqué acá. Me nominaron ahora a la selección regional y logramos la medalla de plata en los paranacionales", comentó Robinson, quien espera seguir en el baloncesto, aunque sin dejar de lado el paracanotaje, para lo cual ya tiene algunos desafíos, como el panamericano de Sao Paulo en julio, y el Mundial en Hungría.
Y no sólo eso. Además estudia Licenciatura en Cs. del Deporte en UDLA, donde asegura, le dan todas las facilidades para viajar, competir y ponerse al día en sus ramos. "Es un apoyo enorme, que me ayuda a pavimentar el camino para cuando llegue el tiempo del retiro", destacó Méndez.
34 años tiene Robinson Méndez, radicado en Conce y que compite por la región.