ORIGEN

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Antiguamente, las grandes manifestaciones se hacían en espacios abiertos. El aplauso nació cuando los eventos empezaron a hacerse puertas adentro, como en el teatro. En los eventos de exterior la gente gritaba, se manifestaba, pero los eventos en interiores pasaron a tener una connotación más social y burguesa y esa gente quería diferenciarse del pueblo, por lo que no podía gritar.