Hace algunos años se empezó a hablar de la generación "NiNi" para llamar a aquellos jóvenes que ni estudian, ni trabajan. En el otro extremo etario están los NoNo, esto es, adultos mayores que debieran salir del mercado laboral, pero que deciden continuar trabajando.

El término NoNo nace porque no quieren o no pueden dejar el mercado laboral. No quieren porque desean permanecer trabajando, pues aún se sienten joviales o consideran que pueden ser un aporte en la formación de generaciones más jóvenes y en la gestión de las organizaciones, o no pueden porque su nivel de ingresos bajaría considerablemente producto de las bajas pensiones del sistema.

Estos adultos mayores se asocian a las personas nacidas entre 1945 y 1964, que en estos años ya debieran comenzar a jubilar. Sin embargo, han decidido postergar su retiro manteniéndose en el mercado laboral, lo que puede traer variados efectos, por ejemplo, en las tasas de desempleo o porque quedan menos plazas para profesionales jóvenes.

Las organizaciones deben hacerse cargo de esta realidad. Algunas empresas ya han comenzado a imitar a otros países, que cuentan con un porcentaje importante de estas personas aún en sus empleos. Retail, transporte y turismo. Sin duda, la opción de mantenerse en el mercado del trabajo es una decisión que debemos respetar y las organizaciones deben asumir y evaluar las condiciones bajo las cuales se desempeñan.

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