Carlos Arias
En octubre del año pasado se reunieron de nuevo y se les ocurrió darle forma a un lugar abandonado cerca de la cancha del sector Carlos Mahns de Tomé. Se hacen llamar Los Pampinos (porque antiguamente el sector se llamaba Cerro La Pampa) son 10 hombres, muchos de ellos jubilados, que vieron en la instalación de piscinas y juegos recreativos, el mejor uso que se le podría dar a un lugar que no ocupaban y que podría haber sido foco de malos usos.
"La idea es beneficiar a los niños. Las madres no siempre tienen los medios para ir a la playa, entonces vienen aquí y disfrutan. Esto se ha convertido en algo lindo para la población", señaló Jorge Cartes, integrante.
Inicios
"El 4 de octubre del año pasado nos juntamos y empezamos a tirar ideas. Así nació esto de las piscinas. Empezamos a movernos de un lado a otro, a pagar $1.000 mensuales y compramos la primera piscina", agregó Héctor Segura, otro pampino.
Carlos Mahns es un cerro que está cerca del centro de Tomé y debe su nombre a un importante personaje de la industria textil. "Llegué aquí hace 50 años, porque fui trabajador de la Fábrica Nacional de Paños de Tomé. Me he encontrado con amigos bastante buenos. Es una alegría tremenda para los niños y nosotros también nos sentimos felices, porque somos padres de familia. Mis hijos se criaron aquí y ahora están casados los dos", relató Juan Muñoz, miembro de la grupo.
"Tengo 72 años, no soy de los más antiguos de esta población, pero me he dado cuenta del espíritu que tiene la gente. Somos todas personas de escasos recursos, no somos personas que dispongan de grandes medios. No tenemos nada, pero queremos hacerlo todo, como dijo Carlos Dittborn. Con lo mínimo hemos logrado hacer esto que nos ha hecho a todos felices", subrayó Juan Pedreros.
"Aquí han habido personas muy destacadas, como Marcelo y su señora, todos trabajamos cooperando de una u otra manera. Es lindo para la población, estoy orgulloso, hemos sido halagados por gente que viene de visita", indicó Jorge Cartes.
Proyecto
"Estamos peleando un container, porque tenemos televisor, cocina y algunas cosas que nos regalaron y tenemos que guardar esas cosas", resaltó Héctor Segura.
"Hoy estamos ocupando los camarines de la población Carlos Mahns, pero creo que necesitamos un espacio propio para seguir desarrollando nuevas ideas. Seguir avanzando en esto hasta que Dios nos de vida para seguir. Esto va a ser un legado para otras personas que vienen detrás de nosotros, que sigan continuando esta misma obra", añadió Marcelo Fuentes.
"La acogida de los vecinos ha sido buenísima, ellos están felices y contentos de ver a sus hijos acá en las tardes disfrutando, pasándola bien en las piscinas y en la cama elástica, eso nos conforta. El objetivo se ha logrado" destacó el vecino de Carlos Mahns.
Sobre los planes a futuro el pampino dijo que "queremos hacer muchas cosas más, colocar taca tacas, mesas de pin pon, para que los niños sigan disfrutando el año, no solamente en verano".
Respecto a los beneficios señalaron que "haber instalado este lugar para los niños, nos ha vuelto a reunir como vecinos, hemos vuelto a conversar", concluyó Marcelo Fuentes.