Pablo Martínez Tizka
Un incendio de pastizales, árboles y basura en Michaihue se registró durante la tarde de este jueves, en el que las llamas y el humo amenazaron a 15 viviendas del sector. Para fortuna de los sampedrinos, el siniestro fue contenido a las 16.45 y controlado a las 17.00, gracias al trabajo de siete unidades de Bomberos, cuatro brigadas de Conaf, dos helicópteros y un avión cisterna.
Joel Escamilla, jefe de la brigada helitransportada de Conaf, resumió el procedimiento en que "se quemaron alrededor de tres hectáreas. La mayor complejidad fue el viento fuerte y el humo provocado por la quema de neumáticos en el área del incendio".
Añadió que "se protegieron 15 viviendas y vegetación natural en amenaza directa del incendio. Realizo un llamado a la prudencia con el uso del fuego".
Bomberos
El segundo comandante del Cuerpo de Bomberos de San Pedro de La Paz, Orlando Contreras, afirmó que "trabajamos cuatro unidades de San Pedro, dos de Concepción y una de Hualpén. En el lugar había muchos neumáticos y árboles".
Además, señaló que "la dotación fue de 45 bomberos. Se llamó a otros compañeros porque pensamos que no podíamos controlar el fuego debido al viento, que era de alta intensidad. Pedimos refuerzos y nos ayudaron".
Contreras destacó asimismo el actuar del equipo. "Trabajamos con carros bomba y dos compañías especializadas en estas situaciones. Tenemos fortalecidas nuestras unidades, pues año tras año crecemos para atender las emergencias".
Finalmente, agradeció el apoyo de Conaf. "Utilizaron tecnología para georreferenciar el incendio, además de instrumentos de medición".
Prevención
Rodrigo Oyarzún es el gerente de la empresa Ignous, encargada de desarrollar herramientas para la prevención de incendios forestales.
Oyarzún también es miembro de la Asociación Nacional de Investigadores de Incendios (NAFI) reflexionó sobre la cantidad de incendios forestales que pueden afectar a la región del Biobío durante este verano.
"El cambio climático es una realidad. En una comisión sobre incendios forestales de mayor magnitud, concluimos en que son eventos que pueden ocurrir cada dos años, cuando antes era cada cinco. El riesgo hoy es altísimo".
La innovación tecnológica de la empresa de Oyarzún consiste en "sistemas de monitoreo satelital en donde encapsulamos información de los focos de calor a través del sistema Mobis que usa la Nasa, en el que luego obtenemos variables como la humedad, la temperatura, la velocidad del viento y los días de lluvia. Esto nos permite clasificar cada punto como un punto de alta, mediana o nula probabilidad de incendio", dijo.
Finalmente, el experto destacó el uso de drones "para georreferenciar la zona y analizar el terreno en 3D para obtener más datos. Nuestra labor es la detección de lugares que potencialmente pueden sufrir incendios forestales por sus características", finalizó.
"La complejidad fue el viento fuerte y el humo provocado por la quema de neumáticos".
Joel Escamilla,, brigadista jefe"
