Jesús Manuel Herrera
Desde hace casi una década, los jóvenes del sector Tucapel Bajo tienen la oportunidad de participar en el centro cultural Balmaceda Arte Joven, ubicado entre las calles Colo Colo y Ejército. Un espacio que, según los vecinos, tuvo un impacto positivo en un sector que ha sido estigmatizado.
Hilda Paredes, presidenta de la junta de vecinos Villa Esperanza, señaló que el aporte de la corporación cultural ha marcado un antes y después en el sector, permitiendo fomentar la unión y la participación en proyectos sociales de sus habitantes.
"Al principio, pensábamos que eran actividades para gente que vivía fuera de la población. Sin embargo, con el paso del tiempo, el Balmaceda empezó a realizar actividades y una mesa comunitaria para que los vecinos se arriesgaran a participar", manifestó.
En esa misma línea, la mesa comunitaria no sólo contribuye en la creación y adjudicación de proyectos, sino que además es un espacio de encuentro para el diálogo en completa armonía con los grupos que la componen.
Por su parte, Diego Morales, quien asiste semanalmente al recinto, declaró que "puedo ocupar libremente las salas de ensayo con grupos musicales y teatrales. Tienen buen equipamiento con lo que se pueden presentar shows de gran calidad".
Los talleres que ofrecen son amplios y abarcan desde grupos infantiles hasta comunidades de adultos mayores.
Balmaceda arte joven
Para Pablo Gaete, director de la corporación cultural en la Región del Biobío, no es sorpresa que la llegada al sector de esta propuesta haya impactado tan bien en la comunidad.
"Cuando se empezó a construir el edificio, le sonó a muchos vecinos algo medio extraño, algunos pensaban que era un consultorio o comisaría. Al principio no fue fácil la participación en general, nosotros comenzamos poco a poco", explicó.
Al preguntarle sobre el aporte que Balmaceda Arte Joven realiza a la comunidad, Gaete enfatizó que por un lado la apuesta es acercar a la gente al arte, ya sea en la música, cine, artes escénicas y fotografía, desde una esfera menos empaquetada, y por el otro, estar constantemente dialogando con los diregentes para saber sus inquiteudes.
"La participación de la gente hay que trabajarla día a día, hay que conocerla y romper ciertas desconfianzas", finalizó.
10 años lleva la corporación cultural en el sector apoyando proyectos de los vecinos.