Alfonso Levet G.

Reducidas al mínimo operacional funcionan durante el invierno las brigadas contra incendios forestales en la Región del Biobío.

Si bien hace una década los brigadistas forestales de la zona viajaban a combatir incendios a otras latitudes, la realidad actual es que muchos de ellos sólo pueden trabajar durante la época estival y en el resto del año desarrollan otras actividades.

"Eran proyectos de transferencias tecnológicas, pero el programa está detenido hace años por diversas causas", cuenta Francisco Aruta, de Forest Service Chile, empresa que en 2003 llevó a cerca de 25 brigadistas del Biobío a trabajar combatiendo incendios forestales en Europa.

Aruta detalla que, con los años, "la cantidad de brigadistas se fue reduciendo hasta llegar a cuatro personas, que eran principalmente jefes de operaciones".

Finalmente, el intercambio terminó de hacerse en 2013 y no hay atisbos de poder retomarse. "Era una buena experiencia tanto para nosotros como para las brigadas europeas, pero por ahora estamos reorientados como empresa a las charlas de capacitación y relatorías en general, siempre en el rubro de los incendios forestales", sostuvo.

Durante el invierno

Actualmente, en invierno, los brigadistas forestales que son de planta aprovechan de tomar vacaciones, las que evidentemente no pueden tener durante la temporada de incendios, que tiene su punto más alto durante el verano.

"Hay un número importante de jefes de brigada en Conaf que tienen contratos indefinidos", explica el jefe de la corporación en la provincia de Concepción, Carlos Reveco.

De acuerdo a la información entregada por Conaf Biobío, durante la última temporada de incendios, fueron 400 los brigadistas que trabajaron en distintas zonas de la región, mientras que en la temporada invernal son 30 los jefes de brigada que conforman la dotación.

De ocurrir un incendio forestal en invierno, ellos conforman el equipo de trabajo, "ha ocurrido que hay incendios en otras regiones durante el invierno; en Biobío es poco probable, porque las precipitaciones son abundantes".

El resto de las labores, detalla Reveco, son cuidado y mantenimiento de las bases de las brigadas, así como el apoyo en los programas de prevención, "es importante vincularnos con la comunidad a través de charlas y talleres para preparar la siguiente remporada de incendios".

En los casos en que algún país requiere refuerzo de brigadistas por estar sufriendo con los incendios forestales, "la ayuda se coordina a nivel gubernamental y se envía de acuerdo a las características del incendio en cuestión".

Trabajo en la "contru"

El dirigente del Sindicato de Brigadas Forestales del Biobío, Jhon Quiroz, cuenta que, durante el invierno, "la mayoría de los brigadistas busca trabajo en la construcción, mientras que otros que se suman desde comunas más rurales, se van a trabajar al campo".

El sindicato, que agrupa a cerca de 300 socios en toda la región, consiguió que 16 cupos para brigadistas contratados de manera indefinida, sean del sindicato.

"Las condiciones tanto de trabajo como de equipamiento han ido mejorando, si bien siempre hay alguna dificultad que superar, pero si el brigadista es bueno y tiene un buen comportamiento, sabe que tiene pega segura al año siguiente", detalla Quiroz.

En el caso de quienes prestan servicios a la forestal Arauco, los cargos más especializados, como jefes de brigada y motoserristas, trabajan en invierno dentro de la empresa en labores de reducción de combustibles, y en faenas silvícolas como plantaciones o poda, entre otras.

Aunque desde la citada empresa no entregaron información respecto de cuántos brigadistas son contratados de manera temporal en verano, aseguraron que en invierno, un prcentaje de ellos vuelve a sus estudios superiores y que otra cantidad se dedica a labores en otros rubros.

"La mayoría de los brigadistas busca trabajo en la construcción"

Jhon Quiroz,, Sindicato de Brigadas Forestales"