Mario Saavedra Ponss
Bajo un lienzo que decía "Vivirás eternamente en nuestros corazones", cientos de personas le entregaron ayer por la tarde un último adiós a Soraya Pamela Sepúlveda Riquelme, la mujer de 28 años que fue víctima de un femicidio mientras trabajaba, al interior de la Galería Caracol de Concepción. Su despedida en el Cementerio Parroquial de Penco fue desgarradora y emotiva, marcada por las palabras de amor de su padre, Luis Iván, así como el cariño entregado por las amigas y compañeras de labores de la joven, hacia la familia.
Critica al sistema
Además, los seres queridos de la mujer aprovecharon la instancia para expresar lo que han reflexionado tras la tragedia. Gisela Riquelme, prima de Soraya Pamela, indicó a La Estrella que "lo que más nos entristece son los sueños que deja, como el de estar junto a su hijo y construir una casa para los dos. Nunca pensamos que este iba a ser su final. Cuesta creer que pese a tener órdenes de alejamiento, no haya servido de nada (…) Ella desde 2016 que hizo trámites para que la ayudaran, pero sentimos que no sirvió. El sistema no la pudo proteger, porque no funciona ni siento que vaya a funcionar".
Gisela recordó a su prima como "una persona muy alegre, que siempre estaba trabajando para salir adelante, después de librarse de un matrimonio que fue malo. Después de que se separó de hecho, este hombre la siguió y varias veces mi tío intentó alejarlo, al igual que ella. Pero él dejaba pasar un tiempo y volvía a acosarla y a seguirla, a rondarla mientras trabajaba".
Comunidad dolida
El dolor y tristeza que dejó el cruel femicidio perpetrado por Luis Alberto Gutiérrez Salgado (68), ex cónyuge de la víctima no tocó sólo a la familia de Soraya Pamela sino que a una comunidad entera. Durante la misa en su honor, el párroco Julio Maulén, sacerdote de la Parroquia Nuestra Señora del Carmen, expresó que "no es lo mismo despedir a alguien así, que tenía tantos planes, que se va por decisión de otra persona (…) Hemos visto tanta violencia, no tenemos respeto por nadie. Debemos preguntarnos en momentos así, sí tenemos a Dios en nuestros corazones".
Por otro lado, los vecinos de la población El Jazmín de la comuna de Penco, dejaron ver su apoyo hacia los padres, hermanos e hijo de la fallecida decorando con globos blancos y flores tanto el barrio como el camino que siguió la carroza fúnebre en su llegada al camposanto. Tras ello, los cientos de asistentes se ubicaron con respeto y solemnidad alrededor del nicho familiar, mientras la familia cargaba el ataúd de su amada Soraya Pamela a su descanso final.
Palabras de su papá
"Desde el día en que naciste, cuando me hiciste padre, desde ese momento llenaste mi corazón de alegría y felicidad. Pero el destino quiso otra cosa. Nos dejas con una pena muy grande (…) Tu lugar siempre estará en la casa", expresó Luis Iván, su papá, intentando contener las lágrimas una vez más, para expresar su agradecimiento a los presentes e indicarles que "espero que la recuerden como era: feliz y alegre, porque así es como la vamos a recordar nosotros".
"Cuesta creer que pese a tener órdenes de alejamiento no haya servido de nada".
Gisela Riquelme, prima"